Taylor Heinicke, un suplente de la XFL, con dos partidos en la NFL dio el partidos más complicado para Tampa Bay en playoffs. Acaba de firmar una merecida extensión de contrato con Washington

El 9 de enero pasado, en la ronda de Comodines, los Buccaneers de Tampa Bay salieron como amplios favoritos ante el equipo sin nombre de Washington, que abriría el partido con su cuarto quarterback, el desconocido Taylor Heinicke.  Sin embargo su desempeño en el campo sorprendió a todos y por momentos complicó el partido para los Bucs, que finalmente ganaron 31-23.

En la segunda mitad del partido, Heinecke, quien llegó al equipo como suplente en la XFL, lanzó un pase de anotación, realizó un espectacular acarreo para un segundo touchdown y puso a Washington 18-16, con 3:06 por jugar en el tercer cuarto, pero fallaron la conversión de dos puntos para empatar momentáneamente el partido.

Al final, completó 26 de 44 envíos, con 306 yardas, una anotación por aire, otra por tierra, una intercepción y 46 yardas en acarreos. Esto, sin contar una visita al vestidor, luego de recibir un fuerte golpe en el hombro.

Esta valiente actuación le sirvió al joven de 27 años, originario de Atlanta, Georgia, para recibir una extensión por dos años y 8.75 millones de dólares. Su sueldo en esta temporada, por disputar los últimos dos partidos de la temporada regular y la ronda de Comodines, fue de 160 mil 588 dólares.

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“Estaba en casa tomando clases de matemáticas. Este contacto, es un gran suspiro de alivio. Estoy muy emocionado. Este es el lugar donde quería estar, así que todo salió bastante bien y estoy muy emocionado de estar de regreso”, declaró a la página oficial del equipo sin nombre, tras recibir la noticia.

“Me encanta el grupo que tenemos aquí. Siento que la química está ahí, y eso no es algo que encuentres en todos los equipos, así que definitivamente quería estar de regreso en Washington, ya sea jugar, ser suplente, cualquier cosa. Estoy emocionado de estar en el equipo”, agregó.

Only in America

Egresado en 2015 de la Universidad de Old Dominion, en Virginia, Taylor Heinicke era un desconocido para casi toda la Liga. Solo Ron Rivera le dio trabajo en la escuadra de prácticas de los Panthers de Carolina, luego que no fue seleccionado en el Draft de ese año.

Posteriormente, se convirtió en tercer quarterback de los Vikings de Minnesota hasta que lo cortaron en 2017 por una lesión. Estuvo un mes en el equipo de prácticas de los Patriots de Nueva Inglaterra, donde convivió con Tom Brady.

Debutó en la NFL en noviembre del 2017, con los Texans de Houston y solo completó un pase. Salió de ese partido por una conmoción. Regresó a Carolina y nuevamente una lesión lo dejó fuera del equipo. Para la temporada 2020, encontró trabajo como suplente en los BattleHawks de Saint Louis de la XFL, pero la liga fue cancelada en marzo por la pandemia.

Antes de tener una oportunidad con Washington hacia el final de la temporada, tomaba cursos en línea en su alma mater y fue llamado a la plantilla, luego que el coach Ron Rivera decidió cortar a Dwayne Haskins, por romper los protocolos sanitarios al asistir a un centro nocturno antes de la Semana 16. Entonces, comenzó la historia de cuento de hadas.

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Haskins jugó como titular del equipo hasta la semana 4, cuando Rivera lo mandó a la banca por su bajo rendimiento. Kyle Allen lo suplió entre las Semanas 5 y 9, pero se perdió el resto de la temporada por una fractura en el tobillo. Entonces entró al quite Alex Smith, quien tenía alrededor de dos años sin jugar. Smith jugó entre las Semanas 9 y 14 y sufrió una lesión en la pantorrilla que le impidió participar en los siguientes dos partidos.

Previo a la penúltima semana de la temporada regular, Haskins iba a ser cortado, pero ante la situación de Smith, decidieron mantenerlo en el roster. En la Semana 16 ante Carolina, Haskins fue enviado a la banca por otra pobre actuación y Heinecke volvió a jugar en la NFL, completando 12 de 19 pases, 137 yardas y una anotación, con un rating de 102.3. Washington perdió, pero el pasador demostró un mejor nivel que su titular.

Para la última semana de la temporada regular Washington cortó a Haskins y el partido lo abrió Alex Smith, pero se resintió de su lesión y ya no pudo estar listo para los playoffs. La responsabilidad recayó en el joven con solo dos cuartos de experiencia en la NFL. Su primera apertura como titular en la NFL ocurrió en los playoffs.

¿Quién será el quarterback en Washington?

Ahora, tanto Alex Smith como Taylor Heinicke tienen contrato con el equipo y pelearán por la titularidad, mientras Kyle Allen terminó su contrato de un año y será agente libre con derechos exclusivos para Washington, por lo que también estaría en la pugna por la titularidad.

Al respecto, el coach Ron Rivera adelantó: “Todavía estamos analizando todas nuestras opciones. Creo que lo más importante es que tenemos que asegurarnos de encontrar el correcto. ¿Es imperativo encontrarlos ahora mismo? No necesariamente. Nos encantaría, pero a medida que avancemos en este proceso, agotaremos todas las vías”.

Días antes, la directiva de Washington entró en la pugna por el exquarterback de los Lions de Detroit, Mathew Stafford, quien finalmente llegó a los Rams de Los Ángeles.

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Smith es un veterano de 36 años y tiene contrato hasta la temporada 2022 con un sueldo de 40 millones durante las próximas dos temporadas. Aunque ganó el reconocimiento como Regreso del Año, aún no es seguro que regrese con el equipo por el tope salarial y por un posible retiro, luego de sobreponerse a la terrible lesión en la pierna derecha, que lo alejó dos años del emparrillado.

¿Por qué no darle una nueva oportunidad al desconocido Heinecke, con un campo de entrenamiento completo, para demostrar que valió la pena todo el tiempo de espera?