Por Concacaf, en los 10 mejores equipos de Europa solo hay un mexicano, Héctor Herrera, mientras EEUU tiene tres representantes

Hace algunos años Hugo Sánchez dijo en televisión que un entrenamiento en Europa equivale a jugar más de cinco partidos en la Liga MX. Si eso es cierto (tomando sus debidas precauciones) entonces los números no favorecen al futbol mexicano ni a la Concacaf en general, solo hay un futbolista del país que tiene un sitio entre los 10 mejores equipos según el ranking de clubes de la UEFA y de nuestra confederación solo hay seis representantes.

¿Seis son muchos o pocos? Seis son menos de la mitad de jugadores africanos que hay en el top-10 de clubes y 7.5 veces menos que el total de futbolistas de la zona de la Conmebol. Sería muy ‘pretencioso’ presumir que Concacaf tiene ‘más’ que Asia u Oceanía.

¿Realmente jugar en Europa marca diferencia? Agustín Marchesín, exportero del América y ahora cuartofinalista de la Champions League con el Porto le dijo hace unos meses a TyC Sports las ventajas de estar allá. Si sumamos esas reflexiones con las que han hecho Rafael Márquez, el propio Hugo Sánchez y Gerardo Martino, actual técnico de la Selección Mexicano, la respuesta a la pregunta sería lo siguiente:

Las diferencias entre México y Europa radican en el “nivel competitivo que es más alto”
Mayor exposición mediática
La presión, todo el tiempo, te ayuda a mejorar tus cualidades
El nivel de los jugadores es mayor, están los mejores del mundo con los que compiten cada semana
Los entrenamientos son más exigentes
Impulsa para lograr convocatorias a selección nacional
Fortalece el nivel de resistencia mental

“El paso para crecer se da frente a las mayores selecciones que están en Europa”, dijo a finales del 2019 Gerardo Martino y también ha explicado sobre los beneficios de participar en el futbol de aquella región.

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Héctor Herrera, Atlético de Madrid
Héctor Herrera, único mexicano que juega en un equipo Top 10 de Europa

Uno de los puntos clave para llegar a la élite de Europa es primero lograr jugar allá, luego hacer buenas temporadas para que alguno de ellos se interese en sus servicios, aunque claro, algunos se ‘saltan’ ese camino como Javier Hernández que llegó directo al Manchester United.

Pero en general no ocurre de esa manera, lo más común es que un club de mediana categoría firme a un jugador y desde allí inicie la búsqueda para llegar a lo más alto, pero claro, incluso para llegar a ese momento los futbolistas mexicanos tienen que renunciar al privilegio de los buenos sueldos y comodidades que brinda ser jugador en el país.

“El futbol mexicano es muy bien pagado y a veces los jugadores tienen miedo a salir porque está cómodo. Nosotros podemos traer jugadores medios por nuestras condiciones económicas, pues sus salarios son inalcanzables para nosotros. Les pagan mejor que en Brasil y Argentina”, dijo Carlos Mourinho, presidente del Celta de Vigo, hace unos meses al diario AS.

Entre los 10 equipos más poderosos de Europa solo hay un mexicano, Héctor Herrera. También tendremos un representante en cuartos de final de la Champions League con “Tecatito” Corona (Porto). Pero si solo ocupamos a la mejor decena de clubes ahí Estados Unidos tiene a más representantes: Sergiño Dest (Barcelona), Zack Steffen (Manchester City) y Weston McKennie (Juventus). Los otros dos de la confederación son el tico Keylor Navas de Costa Rica (PSG) y el canadiense Alphonso Davis (Bayern Múnich).

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Y jugar en los mejores equipos del mundo claro que tiene sus consecuencias, algunos lo llevan bien, pero muchos viven en un estrés cotidiano. Por ejemplo, el alemán Per Metesacker llegó al Arsenal en 2011 y hace unos años confesó que “antes de los partidos vomito o tengo diarrea”. La élite también te hace sufrir.

Jugadores de confederaciones en los 10 equipos más importantes de Europa

  • Conmebol: 45
  • África: 13
  • Concacaf: 6

“Las realidades económicas y sociales de los países también tiene que ver para la venta de jugadores al extranjero, ahora por necesidad en Argentina se van más jóvenes”, dice Federico Czesli, candidato a doctor de Antropología por la Universidad de San Martín y quien ha hecho estudios de futbol.

Ricardo Osorio, quien jugó en Alemania con el Stuttgart recuerda que la disciplina y el trabajo físico eran fundamentales para estar en la Bundesliga. Solo basta recordar cómo se fue Carlos Salcido de Chivas y el cuerpo que se formó tras su paso en Holanda e Inglaterra.

En el Betis, Diego Lainez, el jugador mexicano se sometió durante varios meses a un trabajo físico que tenía como finalidad incrementar su masa muscular. “Lainez es el caso de un jugador que sale de su equipo de toda la vida, llega a otro país, a otra Liga. Necesita otra composición corporal. El jugador debe adaptarse a unos nuevos hábitos alimenticios, sabores, ganar peso, masa muscular para poder afrontar la competición de otra manera” comentó Giuseppe Ricciardi, nutriólogo del club.

Desde lo físico, mental y lo deportivo. Esas son las tres cosas que se pulen en Europa. Algunos lo logran, otros no. Pero estar en la élite ayuda a mejorar y eso se traslada a las selecciones nacionales. Hay entre los 10 mejores equipos de Europa 45 jugadores de la Conmebol entre argentinos, colombianos, brasileños, uruguayos. La data nos explica también la competitividad.