Los aficionados de Real Madrid de todo el mundo se despertaron, almorzaron o cenaron una noticia excepcional: la incertidumbre de la continuidad de Carlo Ancelotti se disipó con una renovación hasta 2026, o sea, tres temporadas más del italiano en el banquillo de la Casa Blanca aseguradas. El segundo ciclo del mítico entrenador sigue más vivo que nunca, más allá del interés concreto de la selección brasilera de fútbol, que sigue sin un rumbo fijo.
Parece que el presente le está sentando bien al Real Madrid, ya que Endrick ha pasado sus primeros días en la ciudad capital, el proyecto de la superliga fue aceptado por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea y han tomado el liderato del torneo local, pero esta es la frutilla del postre. “Hoy es un día feliz. El Real Madrid y yo continuamos nuestro camino juntos en busca de nuevos y mayores éxitos. Gracias a todos y Hala Madrid!!” publicó el entrenador en sus redes sociales.
La entidad merengue y quien empezara su carrera técnica en el Reggiana de la segunda división italiana tienen una relación más que especial, ya que de los 25 títulos que tiene Ancelotti en su trayectoria, 9 fueron con el Real Madrid. Él fue el encargado de para el 11 que venció, en Lisboa, al Atlético de Madrid en la Champions recordada por el cabezazo de Sergio Ramos, en la temporada 2014. Luego de ganar todo ese año, y de un 2015 sin títulos, el italiano abandonó el conjunto blanco para luego retornar ante la marcha de Zinedine Zidane en 2021.
La renovación, y el período de tiempo por el cual el veterano coach firmó por el Real Madrid no solo movió una ficha importante en el mercado europeo sino que también en el de las selecciones: desde mediados de año se rumoreaba, cada vez con más fuerza, que el italiano emigraría a Sudamérica para dirigir a Brasil, que luego de la finalización del ciclo de Tité, ha tenido dos entrenadores interinos que le han traido más dudas que certezas. Desde octubre que la Canarinha no gana un partido por Eliminatorias, ya que igualó 1-1 ante Venezuela y perdió ante Uruguay, Colombia y Brasil respectivamente.
Tanta es la crisis en uno de los países más futboleros del mundo que, además de todo ello, el plantazo de Ancelotti fue uno de los condimentos que llevó a que el presidente de la CBF, Enaldo Rodrigues, sea cuestionado por todos los aficionados y luego destituido de su cargo por irregularidades en la última elección de autoridades de la federación verdeamarela. Él mismo fue quien encendió la mecha de Ancelotti en conferencia de prensa: “Él va a estar. Pueden estar seguros”, había soltado Rodrigues en la presentación de Fernando Diniz como interino. Luego de que el italiano negara los vínculos, el dirigente evitó todo tipo de preguntas sobre los acercamientos.
¿Crees que Ancelotti tomó la decisión correcta?