La selección de Siria ya tenía una mirada argentina a partir de la contratación de Héctor Cúper como entrenador. En su trayectoria al frente de representativos nacionales figuraban Georgia, Egipto, Uzbekistán y la República Democrática del Congo, así que estaba a la altura del desafío: disputar la Copa Asiática, torneo continental en el que ya había participado seis veces sin conseguir superar la fase de grupos.
Cúper asumió el objetivo de pasar aunque sea una llave de eliminatoria directa, pero para eso debía competir ante Australia, Uzbekistán y la India. De primeras, el grupo no parecía difícil, pero necesitaba algunos refuerzos de jerarquía y supo encontrarlos en su país natal, donde está arraigada una extensa colectividad siria.
Las Águilas de Qasioun, como se conoce al seleccionado, reforzaron su vínculo con el país campeón del mundo sumando a su plantel a tres jugadores argentinos, nacionalizados a partir de sus antepasados sirios: Jalil Elías, Ezequiel Ham e Ibrahim Hesar.
Los futbolistas de Argentina en la selección de Siria
Jalíl Elías
Mediocampista central que surgió en Newell’s Old Boys y había jugado la temporada del 2023 en San Lorenzo, fue la primera gran imagen del nacionalizado argentino. En el 2021 ya había sido tentado por Siria cuando existía la chance de clasificar al Mundial de Qatar 2022. La realidad es que en Asia compiten naciones más poderosas futbolísticamente hablando y no estuvo ni cerca de jugar la Copa del Mundo que terminó levantando Lionel Messi. ¿Cómo llegó a la selección? Por sus bisabuelos, nacidos y criados en Siria.
El futbolista que ahora juega en el Johor Darul Takzim de la Superliga de Malasia era el volante central que buscaba el DT para plantear el bien marcado mediocampo con un centrocampista defensivo y a su lados dos “todoterrenos”.
Ezequiel Ham
Recordado por la desafortunada jugada en aquel Argentinos Juniors – Boca Juniors de septiembre de 2015: sufrió fractura expuesta de tibia y peroné por un planchazo alevoso de Carlos Tevez que lo puso al borde del retiro del fútbol Se recuperó y en esta Copa Asiática fue uno de los creadores de juego del equipo sirio. El mediocampista que actualmente juega en Independiente Rivadavia utilizó el número 8 en la espalda desde su llegada, precisamente en el arranque del 2023. Decidió vestir la camiseta del país de sus abuelos paternos ya que le resultó imposible tener una chance con la selección argentina.
Ibrahim Hesar
El cordobés siempre expresó que su deseo era jugar algún partido internacional y previo a la Copa Asiática apareció la propuesta de Cúper. El enganche surgido de Belgrano destaca por su habilidad y sobre todo, su llegada al gol. Tan es así que ya suma 2 anotaciones con su “nuevo país”. Hoy, más cerca de la realidad que afronta Siria, vive en Irán y juega para Foolad FC de la Iran Pro League.
En la Argentina, Cúper fue entrenador de Huracán y de Lanús. Luego continuó su carrera en España (Mallorca, Betis, Valencia y Racing de Santander), Italia (Inter y Parma), Grecia (Aris Salónica), Turquía (Orduspor) y los Emiratos Árabes (Al Wasl), además de las selecciones antes mencionadas. Con 68 años y tres refuerzos argentinos le terminó dando ilusión a los 21 millones de sirios que sólo se conformaban con clasificar a la siguiente etapa de cualquier manera. Ante Irán, en octavos de final, no pudo concretar el gol que merecían en el tiempo extra y la fortuna de los penales no estuvo de su lado. Dar batalla hasta el final e intentar jugar, esas sí que son costumbres de Argentina y en Siria las tienen presentes.