La Primera División argentina tiene al certamen con más lesiones por rotura de ligamentos cruzados durante este 2024 en todo el mundo. Parece inexplicable pero solo la liga del campeón del mundo supera la suma de las mejores de Europa.
Las críticas hacia Claudio Tapia y su grupo de trabajo que rige la AFA no son de la nada misma. En el país donde surgieron figuras como Lionel Messi y Diego Armando Maradona, el juego está cada vez más desgastado. Y quien dice desgastado piensa en un juego aburrido, de poca creatividad y mucha aspereza, rústico. A la sombra del título conseguido en Qatar, ese es el fútbol argentino de hoy.
Los campos de juego son, en algunos casos, prácticamente imposibles de sobrellevar. El ambiente de los estadios puede contrarrestar el mal estado de una cancha pero no siempre es así. El verde -o no tan verde- césped es un desafío para sus encargados, los calendarios tan ajustados no permiten mejoras.
Rotura de ligamentos en Argentina, víctimas de malas canchas
Argentina ya superó los 21 jugadores con ligamentos cruzados rotos en lo que va de este año. El dato más relevante es que, si se suman las 5 grandes ligas europeas, no la alcanzan. En Alemania, que es el país donde más lesionados hubo, se registraron 8, en España 3. Francia, Italia e Inglaterra 2.
En el viejo continente los jugadores están preparados física y psicológicamente para soportar 90 minutos cada dos o tres días, pero también acompaña el buen estado del terreno. En Argentina se está volviendo cada vez más cotidiano el exceso de partidos debido al mal organizado y extenuante calendario.
Jorge Batista, médico de Boca Juniors, brindó su visión sobre las roturas de ligamentos en el fútbol local vía Instagram:
“Calendario muy apretado, terrenos de juego en algunos casos en mal estado, modas en el uso de tapones semicirculares en lugar de tapones redondos, estrés psíquico (todos se juegan algo) y fatiga física. El fútbol argentino es sumamente difícil. El trabajo de los preparadores físicos es excelente. Si bien la mayoría son lesiones indirectas, también debo remarcar que en el fútbol europeo se protege más al jugador. Una o dos faltas, amarilla y luego roja. De todo esto se me ocurre una sola conclusión: no veo una salida rápida. Se seguirán rompiendo cada vez más jugadores, es inevitable. No hay programa de prevención que se pueda instaurar. Las variables a corregir son muchísimas y tocan intereses económicos en muchos casos. Una pena”.
Asimismo, el estilo de los tapones también puede ser un detalle a tener en cuenta: antiguamente eran 6 tapones en línea y redondos. Hoy, con las “nuevas tecnologías” para el deporte, sumado al marketing, la suela es mucho más dura, con tapones cuadrados y largos, lo que tiende a generar más posibilidades de que el propio jugador se trabe con el suelo fatalmente.
“Siempre se pueden hacer cosas para mejorar la situación. Sería muy positivo para la salud y la calidad de vida futura de los futbolistas que se diese esa pequeña batalla que está a nuestro alcance para implementar: la implementación de un reporte de lesiones institucional y federativo en todos los equipos del fútbol argentino. Un monitoreo que permitiese vigilar y estudiar epidemias como hay en otras ligas profesionales y no existe en la Argentina. Si queremos mejorar, eso es mucho más importante que escribir en las redes sociales. Si se convoca, pongo a disposición mi aporte desinteresado”, expresó en la web de 442 Perfil el doctor Juan Manuel Herbella, ex futbolista de Vélez Sarsfield, entre otros equipos, y hoy dedicado a la medicina en el deporte.
Más allá de los casos de los propios jugadores, los médicos se quejan por tantas desgracias, ¿por qué Chiqui Tapia y su grupo de trabajo no empatizan y buscan soluciones? ¿Será que los jugadores son simplemente un número?