La campeona defensora llega con un equipo completamente diferente al que levantó la Eurocopa en Wembley hace tres años. La Azzurra tiene una gestión y, si bien no se la puede descartar, luce complicado que puedan subirse al podio.
La figura: Federico Chiesa
Luego de algunos años donde no terminaba de dar el estirón, ya se ha ganado la etiqueta de estrella. Con el cuadro italiano se ha consolidado como una pieza relevante y tendrá una prueba de fuego en el torneo continental. El atacante de 26 años no tuvo una temporada extraordinaria con la Juventus pero podría cerrarla de gran manera en Alemania.
El entrenador: Luciano Spalletti
Su éxito con el Napoli le valió el ser contratado en el cuadro italiano de manera casi urgente. Apenas lleva ochos meses en el cargo y de a poco ha intentado sumarle confianza a su plantilla. Sólo la poderosa Inglaterra pudo vencer a la Azzurra en los 10 juegos que el técnico ha dirigido.
La promesa: Riccardo Calafiori
Siempre se ha considerado que Italia es cuna de defensores y el zaguero del Bologna se suma a la lista. El central de 22 años es el más joven de la convocatoria. Pese a esto, apunta a ser una de las revelaciones de todo el torneo e incluso ya se habla de que grandes equipos estarían pujando por su carta.
La historia: Una defensa que luce prácticamente imposible
Después de la consagración mundial en Alemania 2006, ya son casi dos décadas en las que la selección italiana ha transitado un camino de irregularidades. Eliminado en primera ronda en Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, lo que siguió fue aun peor: se quedó afuera de Rusia 2018 y Qatar 2022. Pese a que son los vigentes campeones de Europa, no se les ve por encima de otros combinados europeos. Con Spalletti apuntan más a un ciclo que les permita llegar a la Copa del Mundo en 2026 que apuntar a la victoria continental.
¿Será que Italia pueda sorprender en la UEFA Euro 2024?
