La temporada 1984/85 de la NBA tuvo a Michael Jordan entre sus filas, pero no fue hasta los 90 que el 23 empezó a ser determinante dentro y fuera de la cancha. Lionel Messi debutó con la camiseta del Barcelona en 2003 y, si bien mostraba destellos de magia, no era ni cerca el mayor atractivo ni activo del conjunto de la Ciudad Condal. Muy diferente es este caso en la WNBA: el impacto en la liga fue inmediato en todo sentido… Caitlin Clark ¿el mayor impacto de la historia de los deportes?

No se descubre nada cuando decimos que Caitlin Clark es una fuera de serie. Era una incógnita el cómo la estrella máxima del baloncesto universitario en la historia iba a adaptarse a jugar con las profesionales en la NBA, y en su primera temporada regular con el Indiana Fever no solo deslumbró desde lo estadístico sino que cumplió con varios hitos que hacen de su historia una de las más impresionantes en cuanto a adaptación al máximo nivel.

Los números no mienten: en 40 partidos de temporada regular, la base/escolta surgida de la Universidad de IOWA promedió 19.2 puntos, 8.4 asistencias y 6 rebotes por partido saliendo de titular para el conjunto dirigido por Christie Sides. Superó todos los récords de puntos y asistencias existentes para una rookie, se metió sin ningún atisbo de duda en el All Star Game y ganó de manera unánime el premio a la Novata del Año, sin contar el sinfín de récords y marcas que consiguió para el equipo de Indiana, que clasificó a PlayOffs con el dúo Clark-Boston a la cabeza. Además, la escolta terminó cuarta en la votación del MVP de la temporada, no muy lejos de la ganadora Aja’a Wilson.

Foto: @CClarkReport en X

Caitlin Clark ¿el mayor impacto de la historia de los deportes?

Lo más impactante de la virtuosa jugadora, sin embargo, es la cantidad de personas, vistas, dinero y repercusión que atrae. Si empezamos desde lo local, el efecto Caitlin Clark marcó la diferencia aumentando el numero de asistentes a los partidos del Fever casi quintuplicando el número de la temporada anterior y superando a los Pacers, el equipo de la NBA de la ciudad, que juega en el mismo establecimiento. Saliendo de casa, las Washington Mystics movieron el juego de donde juegan regularmente a la Capital One Arena de los Wizards y lograron el máximo número de asistentes en un partido de la WNBA con 20711 almas sentadas mirando el encuentro.

Si pasamos a los grandes escenarios, que más grande que las finales de la WNBA. Comprar entradas para todos los juegos de las finales de 2023 -ganadas por Las Vegas Aces- costó tres dólares menos que un ticket para el primer partido de Playoff que disputó la número 22 del Fever… y si nos vamos a lo que son las visualizaciones por televisión, hay una diferencia abismal si el juego es disputado por Caitlin Clark o no: según Michael Mulvihill, los números totales de visualizaciones entre partidos disputados por Caitlin Clark y todo el resto de equipos varían en un 199%, o sea, los partidos disputados por la escolta de Des Moines fueron vistos por casi 1.200.000, mientras que el resto de disputas fueron sintonizadas por menos de 400.000.

Con la retirada de Diana Taurasi en puerta… ¿podrá Caitlin Clark reclamar el trono de la mejor jugadora de la WNBA en su segundo año?