Lionel Messi debutará en el Clásico del futbol francés con el PSG; Real Madrid y Barcelona disputarán un Clásico más deprimido
Mientras en España, Real Madrid y FC Barcelona se preparan para jugar el primer clásico post-Messi (y también el primero en mucho tiempo sin Sergio Ramos como merengue), el astro rosarino se verá envuelto con el PSG en otra gran rivalidad.
La ausencia de Lionel Messi y el mal momento del Barça parecen restar interés a una de las rivalidades más sonadas del mundo. También atentan contra la curva de atención el encuentro entre Liverpool y Manchester United en la Premier League, así como el Inter-Juve de la Serie A.
Sin duda alguna, los catalanes parecen indefensos sin un hombre que marcó 26 goles y repartió 14 asistencias en 45 partidos ante los blancos, según Transfermarkt. Sobre todo en Liga, “La Pulga” castigó al Madrid con 18 tantos y nueve asistencias en 29 presentaciones, aunque el último gol del argentino ante su adversario más enfrentado de por vida databa del 6 de mayo de 2018 para igualar el choque 2-2 en la jornada 36 de la máxima categoría del balompié español.
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En su último Clásico, el pasado 10 de abril, Messi remató siete veces al arco sin suerte alguna. Generó dos ocasiones de gol, centró cinco veces y completó 59 pases. En 99 toques a la esférica, aprovechó para hilvanar siete regates en la derrota blaugrana por 1-2.
El multi Balón de Oro ahora debutará en “Le Classique” contra un Olympique de Marsella que recibe a los líderes de la Ligue 1 como tercero de la tabla. Si bien Leo todavía no ha marcado en la Primera División francesa, la ocasión resulta propicia para su estreno goleador después de un juegazo ante el RB Leipzig en Champions donde el 30 de los parisinos consiguió par de dianas.
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En una épica batalla táctica albiceleste entre Jorge Sampaoli y Mauricio Pochettino, el papel del ex Barça resultará fundamental. Un posible regreso de Neymar, la asociación Messi-Mbappé y la forma de los atacantes Arkadiusz Milik y Dimitri Payet por parte de los locales serán otros factores clave para ver un verdadero espectáculo.