El tenista italiano Jannik Sinner rompió con las estadísticas de varios deportistas, entre ellos las de Novak Djokovic. Se convirtió en campeón del Abierto de Australia ante Daniil Medvedev en 5 sets: 3-6, 3-6, 6-4, 6-4 y 6-3. Con tan solo 22 años está poniendo su nombre en la historia del tenis, una buena elección para su vida, que podría haber estado dedicada al esquí por su formación en dicho deporte desde su juventud.
Estar en los zapatos de Jannik Sinner no debe ser fácil, pero en este momento todo debe ser una fiesta. Ganar el primer Grand Slam del año es uno de los momentos más lindos de su vida que jamás olvidará. El número 4 del ranking ATP tuvo que enfrentar al Loco Daniil en una final reñida, en la que en los dos primeros sets el ruso fue muy superior. Solo faltaba apurar un “poquito” más al Niño Zanahoria, como muchos graciosamente le dicen. Pero el joven tenía un plan.
“Sono morto” dijo Sinner en el momento de quiebre del partido. Saber sufrir, de eso se trata. Competir hasta el final. No renunciar. Dar el paso hacia adelante, no quedarse y aprovechar las oportunidades. Eso pasó después. El tercero fue 6-4 a su favor atacando mucho más al número 3 del mundo a partir de puros golpes de drive y revés de fondo. Un juego muy físico donde el italiano, que venía abajo, no se dio por vencido y quizás el ruso se relajó.
Lo de Daniil es realmente duro, porque es la segunda final del Australian Open que pierde. “Realmente voy a intentar hacer todo lo posible conmigo mismo, con mi mente, para que esta derrota no afecte mis futuros torneos y futuras temporadas, porque eso es parte del deporte”, sentenció duramente quien fue mejor al principio del partido, pero fue ampliamente superado después.
Pero claro, Sinner venía con un impulso superlativo: le sacó el invicto que tenía Novak Djokovic de 2195 días sin caer en la Pista Rápida de Melbourne. Es decir, 33 partidos de puras victorias y siendo el rey de la escena australiana. Y otro dato realmente interesante es que Sinner fue el campeón de la primera final en la que ninguno de los “3 hombres de oro” (Djokovic, Nadal y Federer) no dijeron presente. La última vez había sido en el año 2005.
AGRADECIMIENTO A SUS PADRES
Como de costumbre, el campeón realiza una declaración para todos los que se dieron el tiempo de verlo. Sinner decidió tomarse el tiempo de agradecerle a sus padres, quienes lo acompañaron siempre cada vez que quería hacer varios deportes distintos: “Ojalá todo el mundo pudiera tener a mis padres, porque siempre me dejaron elegir lo que quisiera. Incluso cuando era más joven practicaba otros deportes y nunca me presionaron. Deseo esta libertad para tantos niños como sea posible”.
Jannik Sinner y su vida lejos del tenis
En la ciudad de San Candido se practica mucho el Esquí por estar cerca de las montañas con nieve. El joven Jannik, hijo de Jonnah y Singladine, pasaba todas sus tardes esquiando en las mejores montañas del norte de Italia, con mucha influencia alemana, y se fue profesionalizando cada vez hasta el punto de ser campeón nacional dos veces y encontrarse en un listado de los mejores niños del país.
Su visión era muy clara: en el descenso estás 90 segundos, pero si haces algo mal, no hay vuelta atrás. En cambio, en el tenis, podes correr más de 3 horas, cometer varios errores y aún ganar.
A pesar de que no fue una decisión fácil, Sinner se volcó por el tenis ¡y le salió bastante bien!
UNA FELICITACIÓN ESPECIAL: PAPA FRANCISCO
El Sumo Pontifice, desde siempre fanático del deporte en general, realizó un discurso con motivo de la visita al Vaticano del Real Club de Tenis Barcelona por su aniversario 125° y felicitó al tenista italiano por consagrarse campeón por primera vez del Grand Slam desarrollado en Australia. “Felicitaciones a Italia y a Sinner por la victoria. También del tenis se pueden extraer lecciones de vida. El desafío entre jugadores tiene que ver sobre todo con el deseo de imponerse al oponente, pero en realidad, desde su origen inglés, es una expresión de la apertura de los fundadores a lo bueno que puede venir del exterior y al diálogo con otras culturas”, comunicó a todos los espectadores que estaban escuchando sus palabras.
Post consagración manifestó: “Obviamente es un éxito importante pero no cambia nada quién soy. Soy un tipo bastante sencillo. Ayer llamé rápido a mamá, pero estaba celebrando con unos amigos. No es que ella me ignorara, pero de todas formas no quería molestarla. El trabajo no ha terminado, al contrario: apenas ha comenzado. Tengo que volver al gimnasio, fortalecerme físicamente, incluso mentalmente puedo mejorar. Mis oponentes ya me conocen bien”.
El reconocido fanático hincha del Milan levantó su primer gran trofeo, puso su nombre en los libros del tenis mundial y demostró que con una corta edad se puede estar preparado para hacerle frente a cualquiera. Personalidad atractiva, de apariencia muy singular y con el corazón de un verdadero campeón.