Aunque su pase ficha sigue perteneciendo al Atlético de Madrid, el portugués Joao Félix pasa por un buen momento a préstamo en el FC Barcelona donde está anotando goles y también colabora gracias al juego ofensivo del equipo. Justamente ante el Atleti puso su nombre en el marcador y los hinchas colchoneros le dedicaron sus hostilidades. ¿Será que el club de la capital no trata como merece a sus figuras?
Es una realidad que el joven atacante no pasó una buena temporada 2022-23 y decidió primero jugar en el Chelsea, donde le fue aún peor, y regresó a España. Barcelona, como alguna vez él contó que era el club que miró desde pequeño, se interesó y aceptó su contrato.
Ahora le tocó visitar el estadio Cívitas Metropolitano y fue recibido con hostilidad por los hinchas rojiblancos. Abrió el marcador y, entre insultos, decidió no celebrarlo como sí había hecho en la primera vuelta, en el Camp Nou. Quizás fue un desliz, no recordó su pasado o bien, quiso festejarlo, pero fue evidente que los fanáticos quedaron muy molestos con su salida del club. Y es que fue la última gran joya que tuvo el Atlético de Madrid y por la que apostó 126 millones de euros tras su aparición en la Primera División de Portugal con la camiseta del Benfica, uno de los tres clubes grandes del país.
Puede parecer feo, sí, claro, pero los hinchas del Atlético tienen muy presente al luso por haberlos “traicionado”. Es una sensación de odio y rencor. Pero no fue el único gran futbolista que se marchó.
El caso más fuerte de todos, y con muchísimas similitudes al de Félix, es el del colombiano Radamel Falcao García. En 2011 llegó desde el Porto portugués por 45 millones de euros y le bastaron dos temporadas en Madrid para que muchos años después, algunos lo consideren entre los mejores delanteros del club en su historia. Hizo goles de todo tipo y consiguió títulos relevantes. El Tigre luchó de igual a igual ante Barcelona, Real Madrid, e incluso otros clubes de Europa en competencias internacionales; fue un delantero de calidad. De mucha calidad…
Pero en 2013 el Mónaco llegó, puso el dinero que pedía la dirigencia colchonera y se lo llevó. Los primeros rumores eran que cobraría el doble (14M de euros netos anuales). Años más tarde, Falcao explicó que él no tenía intenciones de buscar nuevos horizontes y que su salida fue por una decisión de los directivos. En el Atlético era goleador de una de las mejores ligas del mundo, pero no le dieron otra opción.
Años más atrás pasó con Hugo Sánchez, el histórico delantero mexicano pasó de las filas colchoneras al Real Madrid. Pese a pasar a la historia rojiblanca como una figura, a la fecha la afición no lo tiene en un buen concepto por hacerse ídolo con el acérrimo rival tras dejarlos ‘a la deriva’.
Otro gran delantero que pasó por la mejor época del conjunto blanco y rojo fue el uruguayo Diego Forlán. Consiguió la UEFA Europa League y Supercopa europea previo a lo que fue su gran Mundial de Sudáfrica 2010, en el que fue elegido como el mejor futbolista. Ese año para Cachavacha fue el mejor de su carrera. Y todo ese éxito se había preparado a orillas del Manzanares. Luego de que la Celeste se quedara con el cuarto puesto en la Copa del Mundo, Forlán eligió partir.
Se fue dejando 198 partidos y anotó 96 goles en el recuerdo del Atlético. Vendió muchísimo merchandasing y el mundo estaba deslumbrado por él, pero el uruguayo prefirió buscar un nuevo destino en Italia: el Inter de Milán.
Bajo los tres palos, ese mismo año de explosión de Diego Forlán, estaba David de Gea. Arquero joven que daba sus primeros pasos en La Liga, decidió marcharse a la Premier League para defender al Manchester United. ¿Por qué un joven de 19 años quiso dejar el club que lo llevó a la élite y viajar a Inglaterra? ¿El Atlético de Madrid no le daba ese lugar que deseaba? ¿Era por el salario? “El Manchester United es un club perfecto para seguir formándome como jugador y como persona. Para mis características vendrá muy bien y, ahora, espero adaptarme rápido porque es una liga distinta. Para un futbolista es importante seguir creciendo, el Manchester es uno de los mejores clubes del mundo y jugar allí es un paso importante en mi carrera para poder triunfar”, expresó el portero en su última conferencia de prensa en España. Entonces, el Aleti no era el club en el que De Gea creía que llegaría a lo más alto.
El argentino Sergio Agüero fue otra de las tantas estrellas que decidieron alejarse del Atlético y seguir su carrera en la Premier League. El 2011, cuando el club empezó a ser eliminado de competencias europeas y volvía a tener poca trascendencia, el Kun decidió salir: el Manchester City, que presentaba un potencial a futuro enorme, lo sumó a sus filas. No fue fácil, ya que el delantero surgido en Independiente de Avellaneda llevaba su prestigiosa carrera a un club de mucha riqueza y a la vez poca historia. Finalmente, la apuesta le salió más que bien. Durante su estadía en la capital española había sido parte fundamental para ganar los mismos títulos que Forlán.
El último que salió y nunca regresó fue Thibaut Courtois. No es ídolo, pero se convirtió en figura importante para Bélgica, su país, y para la vereda de enfrente: el Real Madrid.
Debutó con el Atlético el 25 de agosto de 2011 en un partido clasificatorio para la Europa League frente al Vitória de Guimaraes y Simeone lo bancó. A pesar de su corta edad, necesitaba el club de la capital de España un portero que pareciera un proyecto a futuro, porque De Gea había decidido emigrar.
Ganó 4 títulos importantes y a nivel personal, también: fue elegido el mejor guardameta de la liga de España del 2013 y se quedó con el Trofeo Zamora de ese mismo año y 2014. Asimismo, estuvo dentro del once ideal del 2014 por la Liga, de la FIFA y de la Liga de Campeones. Pero nunca llegó a un acuerdo económico con el Chelsea y el equipo Blue se lo llevó para reemplazar al checo Petr Cech. Cuatro años más tarde, Courtois volvía a España pero para atajar en el máximo rival y dejaba una declaración polémica: “Si te enfrentas al Real Madrid sabes que cuando juega una final la gana. Ahora estoy en el lado bueno de la historia”.
Los hinchas del conjunto que dirige Diego Pablo Simeone creen que su institución está entre las más grandes de Europa, pero la nómina de grandes jugadores marca que en realidad el Aleti es un equipo que potencia futbolistas y los termina dejando volar a nuevos aires. Para ellos eso es una traición, y se reitera con casos notorios. ¿Retornará João Félix al Atlético cuando finalice su cesión por una temporada? Por lo pronto, los hinchas parecen no estar muy de acuerdo.