Con el termo de mate bajo el brazo y el trabajo como insignia, Edinson Cavani y Miguel Merentiel brillaron ante River Plate en el clásico del fútbol argentino con Boca Juniors, el choque futbolístico más popular de Sudamérica. Los uruguayos forman parte de una larga lista de jugadores charrúas que vistieron la camiseta del Xeneize, y se están metiendo entre los máximos goleadores de esa nacionalidad para el equipo de la Riber con pocas apariciones. De no ser tenidos en cuenta en sus anteriores equipos, los dos celestes conforman el tandem titular del nuevo Boca, que gana con corazón y buen juego.
Paysandú y Salto están a 348 y 458 km en auto de La Boca, pero hay dos de sus nativos que hicieron de La Bombonera su casa. Desde la final de la Copa Libertadores que el Xeneize perdió con su clásico rival, el conjunto ahora presidido por Juan Román Riquelme no había encontrado un plantel con buen manejo del juego más allá de haber ganado 5 títulos desde aquel 18 de diciembre de 2018 hasta la actualidad. La llegada de Diego Martínez le dio una identidad de toque corto y juego interior al equipo Xeneize, que encontró en Merentiel y Cavani los finalizadores perfectos para su sucesiones de pases.
Si bien se vio potenciado por las circunstancias en estos últimos tiempos, Miguel Merentiel llegó a principios de 2023 a Boca. Después de su exitoso paso por Defensa y Justicia, con el que ganó Copa y Recopa Sudamericana, el de Paysandú llegó a Brandsen 805 cedido desde el Palmeiras de Brasil. Su juego aguerrido lo llevó a ser tenido en cuenta por Hugo Ibarra al principio y luego por Jorge Almirón, con el cual se afianzó como titular y fue de gran importancia para lograr el segundo puesto en la Copa Libertadores. En 67 partidos, La Bestia logró el tercer puesto histórico de goleadores charruas en Boca, con 25 conquistas.
“Cavani es el mejor extranjero de todos los tiempos del fútbol argentino” sostuvo Juan Román Riquelme en una de las notas que dio desde que ganó la presidencia de Boca en diciembre del año pasado. Lo cierto es que el de Salto, cuarto máximo goleador del mundo en activo, generó una revolución cuando decidió rescindir su contrato en el Valencia español. Ya en Argentina, se suponía que el tiraflechas sería el diferencial para Boca, pero tardó seis meses en encontrar su mejor versión en el fútbol argentino.
Solo tres conquistas eran parte de su lista con la azul y oro, pero entró en racha luego de un momento puntual: la arenga de los fanáticos de River en el Monumental. A modo de burla, los gallinas festejaron los disparos de calentamiento del Matador hace dos meses. Luego de no poder convertir en ese partido, disputó 9 encuentros y anotó la misma cantidad de goles, siendo crucial en los últimos triunfos del equipo de Martínez.
Con el frente abierto de la Liga Argentina y la Copa Sudamericana… ¿Crees que los Uruguayos podrán obtener títulos con la camiseta de Boca?