El trofeo para el ganador de la Copa Libertadores de América se ha roto o modificado infinidad de veces, algunas por errores tipográficos
Este sábado se juega la Final de la edición 2021 de la Copa Libertadores de América, el segundo torneo de clubes más importante del mundo. Será la ocasión 61 en la que se juega el torneo, pero apenas la quinta en la que dos equipos brasileños se disputan el título: Palmeiras y Flamengo. La sede, un estadio histórico del futbol mundial, el Centenario de Montevideo.
Pero además de todo el sabor que encierra este partido, los premios o un boleto para viajar inmediatamente a Qatar al Mundial de Clubes, la historia del trofeo que se entrega al ganador es sumamente curiosa: se ha roto, se ha modificado infinidad de veces y solo en ocasiones muy especiales se ha quedado en las vitrinas del campeón. Esta es su historia:
Este trofeo fue diseñado para la primera edición del torneo, en 1960. Desde un inició la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol) estableció que solo los equipos que ganaran el torneo tres veces consecutivas, podrían quedarse el original de manera definitiva.
Esto solo ha ocurrido en dos ocasiones: con Estudiantes de La Plata que concretó su tricampeonato en 1970 y posteriormente Independiente de Avellaneda, en 1974. De paso, este equipo es el único que ha ganado las tres ediciones que se han fabricado del trofeo.
Desde 1975, se disputa la tercera reedición de la copa. Hasta el siguiente tricampeonato, cada campeón recibe una réplica oficial.
Copa Libertadores, un trofeo altamente codiciado
El diseño de la copa fue convocado por el peruano Teófilo Salinas, un directivo de Conmebol. Para ello, convocó entre 10 y 12 artesanos en 1959. La propuesta elegida corrió a cargo de Alberto de Gasperi, un italianodueño de la Joyería Camusso, ubicada en Lima, Perú, fundada en 1933.
La versión final de Gasperi estaba confeccionada por varias piezas de plata esterlina ensambladas como un balón de futbol, La unión está cubierta por un listón. Originalmente en él se escribiría el nombre del club campeón, pero como se convirtió en una dificultad, quedó fija la frase “Copa Libertadores”.
De acuerdo con el artesano, estas dos mitades simbolizan “la dualidad del futbol, tanto como una manifestación artística, como su práctica en las calles, tradicional de Latinoamérica”.
En la mitad están los escudos de los países que integran la Conmebol y en la mitad inferior está el logo de la Conmebol. Sobre la esfera se colocó la figura de un hombre golpeando un balón. El modelo se extrajo de una copa de bronce que el artesano encontró y que se usaba para premiar a los ganadores en los colegios de Lima. De hecho la pieza se bañó de plata y se colocó.
El problema de los nombres de los campeones
El trofeo se colocó sobre un pedestal de madera, que originalmente tenía espacio para colocar 18 placas con los nombres de los campeones, divididos en seis bloques de tres placas cada uno. Pero el espacio se acabó tan pronto como en 1977, al parecer, porque los organizadores no tenían mucha fe en que el torneo perdurase.
Para el año siguiente se colocó una línea más, para dar espacio a otras seis placas. También se reubicaron las que ya estaban colocadas. Cuando el espacio volvió a acabarse, se agregó una columna más (siete columnas de cuatro placas cada una). En 1989 volvió el problema y entonces se agregaron placas en el borde del pedestal, este se llenó por tercera vez en 1994.
La siguiente solución fue colocar un pedestal más grande, en 2004. Entonces surgió un nuevo problema: una vez terminado el torneo en ese año. Durante los festejos del campeón, Once Caldas de Colombia, la copa resbaló de las manos de Herly Alcázar y se rompió completamente.
La reparación corrió a cargo del taller Alzaimagen de Chile. Aprovechando los trabajos, se colocaron asas más grandes, y el hombre sobre el balón ahora patea con la izquierda. Originalmente lo hacía a la derecha.
¿Por qué Flamengo es el mejor equipo de América?
Cinco años después se hizo la última modificación: se sustituyeron todas las placas, para que todas fueran de plata y tuvieran la misma medida. Ahora incluyen el nombre y escudo de cada club. Su peso actual es de 10.25 kilos y una longitud de 98 centímetros. La parte metálica es de 63 cm con plata Ley .925. La base mide 35 cm y está hecha con madera de cedro.
Este diseño se llenará nuevamente en 2031.
Las placas contienen el año de la edición, el nombre del club y el país del equipo ganador. Inicialmente el campeón elegía el metal que se usaría (oro, plata o bronce) y tenían distinto tamaño. A partir de las modificaciones hechas en 2009, ahora las placas tienen el año, el nombre del campeón y la ciudad donde proviene el club. A la izquierda se colocó el escudo.
Pero, en la edición de 2018 el patrocinador, Bridgeston, nuevamente puso el desorden y permitió colocar una chapa de oro, la única entre todos los ganadores, actualmente.
Otro problema es la falta de cuidado que se ha tenido con las inscripciones de las placas. En varias ocasiones han tenido errores tipográficos lamentables. Por ejemplo, en el primer tricampeonato, las placas decían “Clube Estudiantes de La Plata”, y cuando el equipo pincharrata ganó de nuevo en 2009 otra vez se escribió mal su nombre, pues decía: “Club Estudientes de La Plata”.
También una réplica que se hizo para exhibirla durante el Mundial de Rusia 2018 tenía un lamentable error geográfico: pues la placa del campeón del 2008, la Liga Deportiva Universitaria (LDU) de Quito, señala que es un equipo peruano. Este error no está en el trofeo original.
Bolsas históricas
Este sábado, Santos buscará su cuarto título, mientras que Palmeiras aspira a su segundo campeonato “continental”. Históricamente el país más ganador es Argentina con 25 títulos, por 19 de los brasileños y ocho de los uruguayos. Además, será la primera final entre equipos brasileños desde el 2006, cuando se enfrentaron el Internacional de Porto Alegre y el Sao Paulo.
Brasil y Argentina también tienen hegemonía en este siglo, pues solo cuatro equipos de otros países han logrado coronarse a partir del 2001: Atlético Nacional y Once Caldas (Colombia), Olimpia (Paraguay) y LDU (Ecuador).
Además de la copa, ambos equipos pelearán por una bolsa inédita de 15 millones de dólares, mientras que el subcampeón recibirá 6 millones. Estas bolsas son adicionales a lo que ambos equipos han ganado a lo largo del torneo. En total, el campeón recibirá 22 millones 550 mil dólares, la bolsa más grande en los 60 años de historia.
La Conmebol informó que aumentó en más de 300% la bolsa que entregó a los equipos participantes, con el objetivo de “reinvertir en el fútbol lo que genera el fútbol”.
Además, el campeón disputará otra bolsa de 1 millón 250 mil dólares en la Recopa sudamericana, ante el campeón de la Copa Sudamericana, Defensa y Justicia de Argentina. En caso de perder, el premio serán 750 mil dólares.
Sorteos y repechajes para los siguientes calificados a Qatar 2022
Otro beneficio es que el título “continental” garantiza un boleto para la edición 2021 de la Libertadores, donde cada equipo calificado recibe un premio de 3 millones de dólares, así como la bolsa que entrega el Mundial de Clubes, que puede ser de 5 millones si gana, 4 millones si queda en segundo puesto, 2.5 millones si es tercero y 2 millones por el cuarto lugar, la bolsa garantizada para el campeón de Conmebol.
En caso que el campeón sudamericano lo gane todo, puede aspirar a 31 millones 800 mil dólares, informó la Confederación Sudamericana.
Las bolsas aumentaron a partir de 2016, cuando la inversión pasó de 71 millones 190 mil dólares a 229 millones 300 mil, para el 2021.