Sean Lee es el indiscutido mejor jugador a la pobre defensiva de los Cowboys en la última década, fue dos veces al Pro Bowl, jugador All-Pro 2016

Después de 11 temporadas liderando la defensiva de los Cowboys de Dallas, el linebacker Sean Lee anunció su retiro de la NFL este lunes.

Indiscutiblemente el mejor jugador a la pobre defensiva de los Cowboys en la última década, llegó al equipo en la segunda ronda del Draft de 2010 procedente de Penn State. Fue dos veces seleccionado al Pro Bowl (2015, 2016) y fue incluido en el primer equipo All-Pro 2016, pero su propensión a las lesiones complicó que tuviera temporadas completas en un equipo que lo necesitaba excesivamente.

“Ha sido un completo honor. He sido bendecido por poder jugar para la increíble familia Jones, con grandes coaches y compañeros que amo como hermanos. Amé cada minuto de jugar e intenté entregar mi corazón y alma para ganar y ayudar a mis compañeros a cualquier costo.

“Decir que las lesiones fueron frustrantes es quedarme corto, pero el apoyo que recibí a lo largo de todas ellas me dio mucha humildad y las lecciones que aprendí batallando contra la adversidad me durarán por toda la vida. Siempre hay arrepentimientos, pero estoy orgulloso de lo que pude lograr y dejo este juego agradecido”, declaró sobre un anuncio, esperado desde hace años.

Cuando Lee estuvo sano se desempeñó como uno de los mejores linebackers en la NFL. Con 34 años de edad, se va como líder de los Cowboys en tacleadas en el 2011 y del 2015 al 2017. Acumula cinco de los siete partidos con mayor número de tacleadas en la historia del equipo, incluyendo un récord de 22 frente a los Giants en 2016.

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También tomó 14 intercepciones de por vida, devolviendo dos de ellas para touchdown, cinco balones sueltos recuperados, dos balones sueltos forzados, 59 derribos para pérdida de yardas y cuatro capturas y un total de 995 tacleadas de por vida, octavo en la historia del equipo, con un promedio de 8.4 tacleadas por encuentro, la mayor cantidad entre los 10 mejores tacleadores en la historia del club.

Sin embargo se perdió infinidad de partidos por lesiones en el tendón de la corva, muñeca, pie, cuello, rodilla, torso y conmociones. Su lesión más grave fue en la temporada 2014 por una ruptura de ligamento anterior cruzado. Jugó en apenas nueve partidos de la temporada pasada luego de someterse a una cirugía por una hernia deportiva en septiembre, pero a pesar de todo, había esperanzas de jugar una duodécima temporada.

Sean Lee

En busca de un líder a la defensiva

“Como individuo, es una de las personas más desprendidas que he conocido. El tipo simplemente ama el juego, y hará lo que sea mejor para el juego. Es extremadamente inteligente, lo entiende como nadie a quien haya conocido. Simplemente, un individuo fenomenal. Su carácter es contagioso.

“Es como un hermano mayor para mí, y sé que quiere ver a todos a su alrededor tener éxito y es lo que le hace especial. Si otras personas están teniendo éxito, si el equipo está teniendo éxito, entonces está igual de contento que si fuera el mismo haciéndolo. Pienso que es especial tener a un tipo así. No sucede muy a menudo”, dijo su compañero de posición, Leighton Vander Esch al término de la temporada

Además de Lee, este año dejaron el equipo otros veteranos de gran peso como el liniero defensivo Tyrone Crawford, quien se retiró tras nueve temporadas y el centro largo de 16 temporadas, L.P. Ladouceur.

Ahora el liderato defensivo recaerá en DeMarcus Lawrence, el defensivo más veterano en el roster, reclutado en la segunda ronda del 2014.

La despedida de Sean Lee

Lee escribió una carta a la nación vaquera, agradeciendo su apoyo:

Durante 11 temporadas tuve el privilegio de llevar puesto la estrella de los Cowboys. Queremos jugar por siempre. Pero hoy es el momento de marcharme.

A la familia Jones, me trataron como a uno de los suyos desde que llegué. Me permitieron brillar y crecer como jugador y como persona. Gracias por su apoyo y amabilidad.

A los entrenadores, sus interminables horas de trabajo me hicieron un mejor jugador y me empujaron a lugares a los que no sabía que podía llegar. Llevaré sus lecciones por el resto de mi vida.

Para mis compañeros de equipo, los amo como hermanos. El vínculo de nuestro sacrificio compartido durará para siempre. Extrañaré la hermandad, pero atesoraré los recuerdos del vestidor después de todas las grandes victorias y duras derrotas.

Al personal de entrenamiento atlético, Dios sabe que se ganaron su dinero trabajando conmigo. Pero no podría haber superado mis lesiones sin ustedes. Britt Brown, gracias por empujarme tanto como lo hiciste.

Para los fanáticos, ustedes me levantaron cuando más lo necesitaba. No quería defraudarlos. Si hay un arrepentimiento, es que nunca ayudé a traer un campeonato a casa, porque ustedes se lo merecen tanto.

A mi familia, siempre has sido mi base. Los amo y aprecio a todos ustedes. No podría haber hecho nada sin su apoyo. Mamá y papá, me mostraron el camino correcto, dándome todas las oportunidades para tener éxito. Para mi hermano y mi hermana, los miraba a ambos en busca de inspiración. A mis suegros, gracias por todo su amor y apoyo. A mi esposa, Megan, te amo. Estuviste ahí en cada lesión, cada mal partido. Nunca hubiera perseverado sin tu apoyo.

Al juego de fútbol, ​​cambiaste mi vida.

Siempre que estoy cerca de un campo, el olor me recuerda a cuando empecé a jugar, el ponerme un casco, esas hombreras, esa tacleada perfecta. Al pensar en la jornada, el vivir cosas que nunca pensé posibles con los hombres y mujeres que hacen de este juego lo que es, estoy más que agradecido.

Gracias, Cowboys Nation. Ha sido mi honor.

sean lee