Barcelona se jugaba una auténtica final ante el Granada en LaLiga. El partido pendiente de los culés podía significar que al final de temporada se llevaran el trofeo a sus vitrinas.
Luego de un sinfín de combinaciones, donde el Barcelona fue de menos a más en el torneo español, llegaron a depender de sí mismos luego de estar incluso hasta fuera de puestos europeos.
En el trámite del encuentro, la postura de los blaugranas estuvo clara desde el principio y comenzaron atacando de buena manera. De los primeros en avisar fue Antoine Griezmann pero nada se llegaba a concretar como gol.
Tendría que aparecer el de siempre, Lionel Messi, para abrir el marcador al minuto 23. El argentino se hizo el espacio dentro del área y recibió la asistencia de Griezmann -quien había realizado una gran jugada individual- para definir cruzado y fuera del alcance del arquero rival.
Desafortunadamente fueron víctimas de sus propios errores en el complemento además de no aumentar su cuota goleadora. Con muy poco, el Granada aprovechó para empatar el marcador al minuto 63, gracias a Darwin Machís.
Poco a poco se fue diluyendo el Barcelona e incluso Ronald Koeman terminó expulsado del encuentro. La remontada se concretó con el gol de Molina al 79, en la recta final.
Tras esto, los culés intentaron alcanzar al Granada pero sus esfuerzos no fueron suficientes. Con la derrota en el Camp Nou, se mantienen en la tercera posición de LaLiga y ya con el mismo número de encuentros que sus rivales directos.
¿Podrán llevarse el torneo?