La imagen es casi siempre la misma en Europa, solo que hay que cambiar las camisetas y los escenarios. Lágrimas, goles que ‘por poquito’ salvan la temporada, drama hasta la última diezmilésima de segundo…
Descender es una catástrofe que daña de alguna manera el alma de todos, de los fans, de los jugadores y de los equipos en Europa. La diferencia, o al menos desde el año pasado, es que ahora muchas veces el dolor se lleva en soledad: en el sillón, en casa, en la cancha. La pandemia arrebató, al menos por un rato, la posibilidad siquiera de que llorar fuera un acto colectivo de miles en los estadios cuando un club perdía la categoría.
No se siente lo mismo. Ver descender a tu equipo en el sofá no es lo mismo que ver a muchos como tú, destrozado. Supongo que se siente como una especie de solidaridad.
Pero la imagen contraria también es extraordinaria. Ascender es quizás una de las cosas más épicas que puede presumir un club en Europa. “Teníamos presión en todo momento, pero ya, ahora sí podemos decir que lo conseguimos”, dijo Víctor Moreno, entrenador del Espanyol, hace unas semanas cuando el club logró ascender a LaLiga con apenas una temporada en Segunda.
Ariel Greco en el libro “Maldita B” relata por qué en muchas ocasiones son más difíciles las segundas divisiones que las primeras. Más allá del nivel deportivo, documentan cómo es que se juegan la vida por lograr ‘algo’ en la segunda división de Argentina. Lo mismo ocurre en Europa o en muchos sitios del mundo.
Pero claro, hay niveles y hay proyectos. Por ejemplo el Espanyol tuvo el presupuesto más alto que ha tenido un club de Segunda División en la historia: 72.5 MDE.
Nadie nunca antes había contado con tanta plata para lograr ascender. Lo hicieron en un año, “creo que se trabajó y los momentos más duros los supimos sobrepasar”, dijo Víctor quien hace un año también ‘descendió’ pero lo hizo con Mallorca y supo lo que todos en el Espanyol sentían.
Con dinero, aunque no nos guste y sigamos aferrándonos al futbol ‘romántico’, buscar el ascenso es un ‘pelín’ más sencillo. ¿Qué hizo el Espanyol con ese presupuesto histórico? Fichar a Víctor que es un experto en conseguir ascensos (que siendo sinceros es una especialidad, no pocos lo logran). Llevó al Nástic de Segunda B a Segunda y al Mallorca lo encaminó de Segunda B hasta LaLiga.
Los recursos fueron tan altos porque LaLiga le pagó casi 60 MDE por su participación en el torneo (eso le correspondió en la repartición que hace el campeonato español año con año) e invirtió 12.5 MDE más para mantener jugadores de ‘Primera’ que eran necesarios para el proyecto.
Raúl de Tomás, Adrián Embarba y Leandro Cabrera llegaron en enero del año pasado y la directiva logró que se quedaran. Además hizo un esfuerzo financiero para retener al exportero del Real Madrid, Diego López y otros jugadores como David López o Sergi Darder.
Norwich es otro de los equipos que estará el próximo año en una primera división y no en cualquiera, sino en La Premier League.
Al terminar el verano del 2020 sabía que este año sería largo, no solo porque descendería y todas las consecuencias financieras y administrativas que vendrían, si no porque tendrían que jugar muchísimo. Una temporada tiene 46 partidos, sin contar los torneos de la FA Cup o la Copa de la Liga y de paso un déficit de más de 30 millones de libras.
Norwich jugó este año en la EFL Championship después de descender la anterior, pero si hay un torneo en el mundo que es muuuuyyy competitivo es justamente la segunda división inglesa. Tan solo en las últimas cinco temporadas entre todos los clubes han gastado 1,210 MDE en fichajes.
El club ha buscado ser competitivo en la Premier. En la temporada 18-19 ascendieron pero un año más tarde debían empacar de nuevo; y hace unas semanas -sí, otra vez- lograron estar en la máxima división.
“La resiliencia”, dice Stuart Webber, director deportivo del equipo, esa fue la clave para estar en Premier League de nuevo. Con 46 partidos por delante no toda la temporada puede ser perfecta. “Si algo aprendimos del descenso es que tenemos que tener la capacidad de que la mayoría del equipo esté sano para los momentos más complicados. Cuidar las lesiones y también mejorar nuestro trabajo de scouteo de jugadores”. Parece poca cosa pero no lo es. Norwich tuvo el año pasado muchos momentos difíciles y sus mejores hombres no estuvieron disponibles.
Este año el ascenso lo deben a jugadores como Emi Buendía, Teemu Pukki, Todd Cantwell, Oliver Skipp, Grant Hanley. Justo en el trabajo del scouteo que dice Webber, el equipo tuvo a préstamo a dos jugadores de los cuales ya compró sus cartas: Benjamin Gibson (9.8 mde) y Dimitrios Giannoulis (7.5 mde).
Si consideramos las cinco mejores ligas del mundo, y a falta de rondas de playoffs en su mayoría, los equipos que ascendieron y estarán en la campaña 21-22 en las primeras divisiones de Europa son: Espanyol (España), Norwich y Watford (Inglaterra), Empoli y Salernitana (Italia) y Troyes (Francia).
El Espanyol como en el Norwich tiene su propio proyecto, ideas, métodos, etc; pero una palabra clave en todos los clubes que logran ascender es “resistir” como una premisa básica, casi religiosa.