Tristemente, cuando Raúl Jiménez más necesita actividad dentro de la cancha, la tendrá menos. La relación entre la selección mexicana y los Wolves se tensó y provocó una mala situación para el mexicano.
Raúl Jiménez apenas disputa sus primeros encuentros oficiales tras sufrir una fractura de cráneo que lo alejó varios meses de las canchas. Tanto para los Wolves como para México era una pieza fundamental hasta antes de la grave lesión.
Durante su recuperación, en ambos cuerpos técnicos dejaron en claro que serían pacientes con la recuperación del delantero pero surgió otro problema. Si bien en los dos equipos hubo plena comunicación sobre el status de su lesión, las cosas cambiaron por las restricciones sanitarias.
El Reino Unido tiene un serio control con los ciudadanos que salen y entran del territorio y México es uno de los países marcados como ‘zona roja’. Desde la Premier League se postularon al respecto y aseguraron que no cederían a los jugadores para las eliminatorias de Conmebol y Concacaf, sin embargo la FIFA no permitió dicha postura.
Gerardo Martino convocó al mexicano de cara a los primeros partidos del octagonal final rumbo a Qatar 2022, sin embargo los Wolves se negaron a cederlo. No hubo mayor tema con el Tri, pues lo sustituyeron con Santiago Giménez, sin embargo el castigo vino de ‘más arriba’.
La propia selección mexicana comunicó que la FIFA castigó al Wolverhampton y Raúl Jiménez no podrá jugar con el equipo mientras dura la fecha FIFA y cinco días posteriores. Esto deja al delantero mexicano sin posibilidad de disputar el siguiente encuentro ante el Watford.
Hasta el momento el club no ha mostrado su postura al respecto pero difícilmente apelará la decisión del máximo referente del futbol mundial.