La exposición que tuvo Shohei Ohtani estos últimos meses es brutal pero el tema de apuestas tocó su puerta. Tener el contrato más lucrativo de la historia del deporte estadounidense significa ser una persona con poder, pero también con el ojo público siempre encima, para bien y para mal. Con un par de partidos jugados con la camiseta Dodger, el japonés se vio involucrado en un escándalo millonario y con infracciones a las reglas de la Major League Baseball. Aquí, el paso a paso de lo que fue saliendo a la luz del escándalo que terminó con una relación de años, investigaciones exhaustivas por parte de la liga y un Ohtani que tuvo que intervenir para calmar las aguas y dar su versión de los hechos.
La noticia había explotado por los aires menos de una semana antes, cuando se descubrió que desde la cuenta bancaria del actual pelotero de Los Angeles Dodgers habían salido 4.5 millones de dólares para un corredor de apuestas del sur de California. Evidentemente, con todo el revuelo que esto ha causado en el mundo del deporte, su portavoz y su mano derecha y traductor Ippei Mizuhara otorgaron una entrevista a ESPN detallando la situación, pero una vez ya en el set el diálogo fue cancelado por los abogados de Ohtani, alegando que no se podía hablar del tema ya que había sido enviado a la Justicia según informó Mundo Deportivo. El beisbolista pasaba de ser culpable… a ser la víctima.
A pocas horas de haber empezado la investigación, se difundió que Ohtani nunca había apostado en deportes, y que el que realmente había girado ese dinero -para saldar deudas- era su amigo y traductor Ippei Mizuhara. Nacido en Tomakomai hace 39 años, conoció al dos veces MVP de la MLB en 2013 en Tokio y se hicieron cercanos. En 2017, cuando Otani fue reclutado por Los Angeles Angels, se llevó a Mizuhara consigo y, desde entonces, lo ha acompañado en todas sus temporadas en la liga americana hasta ahora, que fue despedido por la franquicia de los Dodgers y se ha roto su relación con uno de los mejores beisbolistas de la actualidad.
Luego del despido de Mizuhara, Shohei Ohtani se vio obligado a explicar la situación con sus palabras y lo hizo junto a un nuevo traductor. Entre muecas de conmoción y tristeza, aclaró que Mizuhara no estaría más con él y se defendió de las acusaciones en su contra: “Ippei ha estado robando dinero de mi cuenta y ha dicho mentiras. Nunca he apostado en béisbol ni en ningún otro deporte, nunca he pedido a nadie que lo haga en mi nombre y nunca pasé por una casa de apuestas”. Más allá de todo esto, sigue habiendo un halo de sospecha sobre este caso, ya que es muy difícil que alguien mueva 4.5 millones de dólares sin ser el titular de una cuenta.
¿Quién crees que es el culpable en este caso? ¿Shohei Ohtani rompiendo las reglas o su asistente deshonesto en las apuestas?