Sin Dak Prescott, los Cowboys ganaron de último minuto en campo de los Vikings, con partidazo del suplente Cooper Rush

El quarterback suplente de los Cowboys de Dallas, Cooper Rush, vivió una historia de Cenicienta en pleno Halloween: fue nombrado titular de última hora para iniciar el primer partido de su carrera en la NFL y, pese a tener un inicio complicado, comandó al equipo de la “Estrella Solitaria” a su sexta victoria consecutiva en un apretado 20-16, en el US Bank Stadium.

Rush se preparó durante la semana de descanso del equipo texano en espera de que el titular Dak Prescott pudiera recuperarse de un tirón en la pantorrilla, sufrido en la última jugada de la Semana 6 ante los Patriots.

Y entonces, ante unos Vikings que salieron aguerridos a la defensa, pero sumamente conservadores a la ofensiva, nunca pudieron despegarse en el marcador, aprovechando la ausencia del titular del equipo contrario.

Ambos equipos llegaron empatados a 13 puntos al tercer cuarto y, a mediados del último periodo parecía que tendrían que definir el partido en tiempo extra porque las defensas se impusieron. Sin embargo, en su turno, los Vikings lograron avanzar el campo gracias a tres castigos de foul personal del oponente para llegar a Zona Roja. Sin embargo, la defensiva vaquera apretó y logró limitar el daño a un gol de campo que puso al frente a Minnesota 13-16.

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Con 2:54 por jugar, Rush condujo todo el campo y, con dos grandes recepciones de Amari Cooper pusieron a Dallas en Zona Roja. En tercera y 16 dentro de la 20, los Vikings regalaron cinco y en la siguiente jugada, Ezekiel Elliott convirtió primera y gol 1:04 por jugar. Cooper lanzó entonces su segundo pase de anotación de la noche a Amari Cooper en un pase a la esquina que por fin dio la ventalla a Dallas con 51 segundos por jugar.

Minnesota intentó avanzar el balón, pero ya no tenía tiempos fuera y nunca lograron tener un partido vertical para anotar rápido, por lo que el reloj se les terminó y solo llegaron cerca de medio campo, para sufrir su cuarta derrota de la campaña (3-4), entre los abucheos de su afición.

Mientras que los Cowboys aprovecharon los descalabros de los Bucs (6-2) y los Cardinals (7-1) para escalar al tercer mejor colocado en la Conferencia Nacional y mantenerse 3.5 juegos arriba de los Eagles de Philadelphia en el Este de la Nacional.

Al final, Cooper Rush concretó un partidazo, con ¡325 yardas!, con dos de anotación y una intercepción. Su primer pase de touchdown fue una conexión de 73 yardas con Cedric Wilson, al comenzar la segunda mitad, para empatar el partido a 10 puntos. El mismo Wilson, lanzó un pase a CeeDee Lamb de 35 yardas, en una jugada sorpresa.

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Amari Cooper Cowboys

Por tierra, Elliot tuvo un partido duro, con 50 yardas en 16 acarreos, pero estuvo muy ocupado en labor de bloqueo para proteger a su inexperto quarterback, pero también recibió cuatro pases para 23 yardas. Tony Pollard aportó otras 26 yardas por tierra.

Por aire, Amari Cooper fue de gran ayuda para Rush, con ocho recepciones para 122 yardas y una anotación. Mientras CeeDee Lamb capturó seis envíos para 112 yardas.

A la defensiva, Randy Gregory aportó una captura, aunque se rompió la racha de Trevon Diggs de siete intercepciones en seis partidos consecutivos. Esta noche no pudo robar algún balón. Sin embargo, la unidad apretó en la segunda mitad y limitó a la ofensiva de Kirk Cousins a 184 yardas, tras completar 23 de 35 envíos, uno de ellos para anotación, en pase para Adam Thielen en el primer cuarto.

El corredor Dalvin Cook corrió 78 yardas en 18 acarreos, el más largo de 19 yardas. Por la vía aérea, Thielen atrapó seis envíos para 78 yardas, el más largo de 32 yardas. La defensiva de Minnesota aportó una intercepción y un balón suelto de Rush, pero la ofensiva fue incapaz de cristalizar los errores. Ahora, Minnesota se mantiene como segundo en el Norte de la NFC con 3-4, a cuatro juegos de los Packers, que tienen 7-1.