John Madden y Al Davis crearon a los grandes Raiders de los años 70. También forjaron una amistad entrañable que solo separó la muerte
Este miércoles murió uno de los hombres más influyentes de la NFL en la era del Super Bowl: John Madden, quien participó activamente en el desarrollo de la Liga a lo largo de cuatro décadas. 30 de esos años los pasó en los medios de comunicación y la industria del entretenimiento relacionada con este deporte.
Sin embargo, muchos jóvenes aficionados a la NFL no sabían que el primer gran éxito profesional en la carrera de Madden fue como coach, uno de los más exitosos de la historia a nivel estadístico, con los entonces Raiders de Oakland. Allí, de la mano del hombre que le dio la oportunidad de dirigir a su equipo, Al Davis, crearon la filosofía que identifica al equipo negro y plata incluso después de la muerte de ambos.
Como homenaje, el actual propietario de los Raiders, Mark Davis, se unió al homenaje de todos los allegados a la NFL al legado de Madden, en este caso, como coach.
En la cuenta de Twitter de los Raiders, el hijo de Al Davis posó frente a la antorcha electrónica que se encuentra en una de las cabeceras del estadio Allegiant Stadium, flamante casa de los Raiders en Las Vegas, como un homenaje a los dos hombres que crearon la filosofía de “Commitment to excellence” (Compromiso con la excelencia) que distingue a los Raiders.
La mancuerna que forjó a los Raiders
La dupla consiguió crear a uno de los equipos más exitosos de la década de los 70 y que, se prolongó hasta mediados de la siguiente década. La relación entre Davis y Madden no era tersa, pero se convirtió en una amistas entrañable, que los acompañó el resto de sus vidas. Todo empezó cuando Davis dio la oportunidad a su joven coach de linebackers para hacerse cargo del equipo en 1969. Madden retribuyó a su jefe dándole un equipo temible, que ganó el Super Bowl en 1976.
Pese a la amistad, Davis era muy exigente y quería participar en todos los aspectos de funcionamiento del equipo, aun con un coach como Madden, que mantenía al equipo ganando.
“Al Davis ha sido la mayor influencia en mi vida futbolística profesional. Me dio la oportunidad de ingresar al fútbol profesional en 1967 como entrenador asistente, y a la edad de 32 años, me dio la oportunidad de ser head coach. No había mucha gente que pensara que John Madden, coach de linebackers, fuera el coach de los Raiders.
“Al creyó en mí, me dio la oportunidad. Durante los 10 años que trabajé con él me dio todo. Y cuando salí del equipo seguimos siendo amigos. Cené con él en su cumpleaños. Es uno de mis mejores amigos en la vida”.
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Luego de retirarse como jugador profesional en 1958 por una lesión en la rodilla, John Madden se convirtió en los siguientes años en coach asistente en la Universidad de San Diego State, donde trabajaba en el equipo defensivo. De hecho, trabajaba en el plan de juego para enfrentar a North Dakota State cuando conoció a Al Davis, en noviembre de 1966.
Davis era entonces el gerente general de los Raiders y por recomendación del entonces ex entrenador de los Aztecas, Paul Governali, acudió a conocer a Madden para ofrecerle un puesto como entrenador asistente, tenía algo especial.
Madden recordó que en aquella ocasión Davis se sentó a su lado y le preguntó: “¿Qué estás haciendo?”
“Le dije que tenían grandes divisiones y espacios y que iba a alinear a mis muchachos en los espacios y golpearlos”, contestó Madden.
Entonces Davis le dio algunas sugerencias y la plática continuó hasta que la idea de ambos quedó plasmada en el campo: “De lo único que hablamos fue de nuestra defensa contra la ofensiva de Dakota del Norte. Nada sobre los Raiders”, acotó Madden sobre aquella primera plática. “Puse en práctica algunas de sus ideas ese día y ganamos 36-0. Ese fue el final”.
Al final de la temporada, el coach de los Raiders, John Rauch, le ofreció a Madden el puesto de asistente con los linebackers, que ocupó hasta convertirse en head coach del equipo.
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Oficialmente, Al Davis nombró como nuevo coach a John Madden el 4 de febrero de 1969. Tenía dos años empapado de la filosofía de Davis, que se engloba en una frase sencilla, típica de Davis: “Just win baby”.
Entonces la relación con Davis fue de una mucho mayor exigencia. Quienes lo conocieron lo califican como un hombre intimidante, reservado, combativo y, a menudo, exitoso. Estaba involucrado en todo lo relacionado con su equipo, Por eso durante 40 años fungió como coach, gerente general y propietario del equipo.
Madden y Davis compartieron una pequeña oficina durante sus primeros años. Esa relación, hoy sería considerada como de intromisión, pero en aquel tiempo era una especie de “aportación” a las ideas del coach. De hecho Rauch, antecesor de Madden, salió del equipo porque no pudo con la intromisión de Davis en sus decisiones.
“No era necesario reunirse con Al”, dijo Madden. “Estábamos uno al lado del otro, y simplemente hablábamos. Fue un diálogo constante. En aquellos días todos éramos iguales. Fue una operación tan pequeña. Al, Ron Wolf, yo y como cinco entrenadores. Eso fue todo. Al animó a todos: si tienen un pensamiento, déjenlo escapar”.
“Simplemente me decía que cometió un error con este tipo o con ese tipo y que tenía que arreglar esto. Nunca consiguió al gerente general que quería”. Pero Davis nunca le pidió que volviera para revivir a los Raiders, no era capaz de dar marcha atrás.
El adiós a un amigo
“Era mi mejor amigo”, dijo Madden luego de la muerte de Davis en 2011. “Si tuviera que hacer una llamada, si necesitaba algo, la llamada sería para Al Davis. Perdí al chico de una llamada, al mentor, al padre, al mejor amigo”.
Durante los últimos años de Al Davis, ambos solían hacer un viaje a Las Vegas para celebrar el cumpleaños del dueño de los Raiders, el 4 de julio. “Siempre sintió que éramos parte de su familia y él era parte de nuestra familia”.
La última vez que Madden y Davis se reunieron fue el 2 de octubre de 2011 durante un partido entre los Raiders y los Patriots celebrado en Oakland.
“Sabías que estaba teniendo problemas, pero estuvo mejor esa semana que la semana anterior”, dijo. “Tenía problemas para hablar y beber. Pero es Al Davis y él lucharía contra él. Su madre vivió más de 100 y pensé que él lucharía y viviría hasta los 100″.
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Madden habló con Davis la noche antes de morir. Dijo que lo encontró confundido, pensando en hablar con sus coaches y jugadores. Incluso discutió con Madden.
“Él decía algo que era contrario a lo que crees para ver qué tan firmemente creías en eso. Tuvimos una discusión en curso durante unos 50 años, sobre cómo construir un club. Lo suyo era que empezaras por los esquineros. Lo mío era la línea ofensiva”.
Y también envió un mensaje a los deudos de Davis, tras su muerte su viuda, Carol, y su hijo, Mark: “No reemplazas a un tipo así. De ninguna manera. De ninguna maldita manera. Uno mira las cosas que ha hecho que nadie había hecho antes, siendo un cazatalentos, entrenador asistente, entrenador, entrenador en jefe, gerente general, comisionado y propietario”.
Madden falleció repentinamente a los 85 años el 28 de diciembre de 2021. Después de triunfar con los Raiders, su trayectoria en los medios lo llevaron al Salón de la Fama de la NFL, como coach. Sin embargo, en los medios ganó 16 premios Emmy y participó en 11 Super Bowl. Un pionero en el cronismo deportivo, emanado desde la cancha.