Por primera vez en el Clásico de España, Real Madrid y Barcelona portarán camisetas alternas, que hablan de la filosofía de cada club
Este domingo se realizará una nueva edición del Clásico Español, el campo del Santiago Bernabéu recibirá a dos equipos que, por primera vez en su añeja historia participarán en su partido más importante del año, con uniformes alternativos. Una parte importante de la tradición de esta rivalidad es el duelo de colores, entre blaugranas y el blanco.
¿Pero qué factores provocan que un duelo tradicional cambie uno de los elementos más importantes del partido? La respuesta está fuera de la cancha y los motivos, en estos dos casos particulares, son completamente diferentes.
Los uniformes especiales para el Clásico Español
El equipo local, dejará para otra ocasión el uniforme merengue y, para esta ocasión, portará una edición especial de su uniforme, todo en negro, que les sirve para conmemorar su 120 aniversario, celebrado apenas el 6 de marzo. El diseño corrió a cargo del japonés Yohji Yamamoto, quien ya había creado un diseño similar en 2014-’15, pero con la imagen de un dragón en el pecho.
Mientras que el Barça portará su ya tradicional uniforme “Senyera”, que utiliza los colores de la bandera de Cataluña, con un trasfondo nacionalista en plena capital española y ante la atención de todo el país. Los mensajes parecen claros: festejar la historia y vender camisetas o bien, enviar un mensaje de unidad e independencia y, ¿por qué no?, vender camisetas.
El negocio de las camisetas en la Casa Blanca
Si bien el Real Madrid es uno de los equipos que venden más uniformes en todo el mundo, también intentan revertir una mala época para este negocio, pues desde la salida ce Cristiano Ronaldo del equipo en el verano de 2018, sus ventas cayeron 70% a lo largo de los siguientes tres años. En parte por la falta de un gran vendedor de camisetas y también por la pandemia.
De acuerdo con el diario español El Confidencial, en 2018 Adidas pagó alrededor de 121.7 millones de dólares (mdd) al Real Madrid y esto representa pérdidas tanto para el equipo como para el patrocinador, porque el confinamiento también impidió la asistencia a los estadios y con esto, los aficionados dejaron de comprar camisetas porque podían vestirse como fuera para ver a su equipo en la televisión.
Otro ejemplo fue el cierre parcial del Museo del club es el segundo más visitado de Madrid, cuyo recorrido concluye en la tienda, donde también se suspendió la venta por bastantes meses en 2020 y 2021. Finalmente, aunque son el equipo más poderoso del mundo, también sufren pérdidas a causa de la piratería.
Para 2019, cuando se informó el dato más reciente, el equipo blanco generó unos 199 millones de dólares en ganancias, por este patrocinio con Adidas de 121.7 millones más otros 27 provenientes del patrocinio de Fly Emirates, que se encuentra en el pecho de la camiseta.
Pero a lo que realmente aspira el equipo merengue es a repetir lo sucedido en 2013, cuando solo 48 horas después del fichaje de James Rodríguez el equipo vendió unas 300 mil camisetas con su nombre en todo el mundo, de acuerdo con Euromericas Sports Marketing.
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Un año después, la venta fue de 1 millón de camisetas con el nombre de Cristiano Ronaldo, equivalentes al 69% de todas las camisetas que vendió el equipo en ese año (1 millón 450 mil piezas).
“Con estos números, el equipo se podía dar el lujo de hacer fichajes bomba cada año, pues solo la venta de camisetas servía para pagar los traspasos”, dijo Félix Tejedor, director de la firma Futbolfinanzas.com a la BBC en 2014.
En el caso del delantero colombiano, la venta de su camiseta generó 36 mdd en ganancias, de los cuales el 20% (7 mdd) se repartieron entre Adidas y el Madrid continuó el analista. Mientras que con Cristiano, se generaron 200 mdd de utilidad, un 100% más que lo que el equipo pagó por sus servicios en 2009.
El mensaje de Independencia para el Reino de Cataluña
Por su parte el Barcelona no ha comercializado sus camisetas tan bien como lo hace el Madrid. Pero más allá del aspecto comercial, su mensaje es de “identidad nacional” en el corazón de la capital española.
De hecho, el equipo utilizará este equipamiento a solicitud del presidente del club, Joan Laporta, de acuerdo con el periodista español, Gerard Romero.
En 2021, el Barcelona ya había utilizado una combinación entre los colores blaugrana y los de la bandera catalana, para jugar en Valdebebas ante el Madrid y repitió en el Camp Nou ante el Atlético de Madrid. Pero también en 2014, ante el Athletic Club utilizaron su uniforme de la senyera y el rival portó un uniforme con los colores de la ikurriña, la bandera del País Vasco.
Esta camiseta amarilla con cuatro franjas rojas remite a la bandera de Catalunya, surgida de la leyenda de Guifré el Pilós, conde de Barcelona quien murió en el año 897 en una batalla entre franceses y normandos. El mito relata que, en su lecho de muerte, el emperador francés Luis mojó cuatro dedos en la sangre de Guifré y pintó cuatro rayas verticales en el escudo dorado del conde de Barcelona, quien estuvo a su lado en la lucha.
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Esta equipación con las rayas rojas en diagonal, fue elegido como cuarto uniforme del equipo desde inicios de 2019 y fue presentada con el lema “Ho portem dins” (Lo llevamos dentro) porque propone “un homenaje a sus raíces y a su historia”.
En el mensaje de presentación, el equipo catalán explicó el detalle de portar estos colores, como una manera de representar a este reino, que ha buscado infructuosamente su independencia de España:
“120 años en los que el club se ha consolidado como una entidad abierta al mundo, que entiende el deporte como un fenómeno que permite crear puentes entre personas. Todo, sin perder su identidad ligada a Catalunya, a su cultura y a sus valores”.
Y también durante el lanzamiento, se ofertó una edición limitada de 5 mil piezas, con el lema “Ho portem dins” en una de las mangas.
Obviamente, cada uno de los dos diseños que ha lanzado el equipo, fueron criticados por quienes consideran que es una manera de politizar al club, pues en uno de los videos de presentación, definen a Catalunya como “pequeño país”.
Pero el mensaje del equipo no es solo político. En 2019, el club se embolsó 177 mdd por patrocinios con su camiseta, para convertirse en el segundo equipo con mayores ingresos por este recurso, solo detrás de su némesis de La Liga.
El equipo, abrió su camiseta al patrocinio del gigante tecnológico Rakuten que pagó unos 60.8 mdd en 2017, para ocupar el lugar que dejó Qatar Airways, antes Qatar Foundation y antes a Unicef, el primer patrocinador de su historia, aunque nunca pagó un centavo a la entidad blaugrana. Nike, que viste al equipo desde 1998, pagó los restantes 116.2 mdd por el patrocinio.
