Golden Boy Promotions fue una gran idea de Óscar de la Hoya, que generó grandes cantidades de dinero y también muchísimos problemas
El 18 de marzo de este año, el campeón de peso mediano Gennady Golovkin (GGG) demandó a su promotora, Golden Boy Promotions, propiedad de Óscar De La Hoya, por un incumplimiento de contrato relacionado con su pelea de revancha contra Saúl “Canelo” Álvarez.
El peleador kazajo asegura que el monto que cobró por la pelea no fue correcto y Golden Boy le debe 3 millones de dólares (mdd), por concepto de intereses de otros 9 millones, 25 mil 351 dólares que apenas le fueron pagados el 6 de julio del año pasado.
En su demanda, GGG alega incumplimiento de contrato, incumplimiento del deber fiduciario, conversión, fideicomiso constructivo y contabilidad. Argumenta que los 9 millones que recibió estuvieron mal calculados. De hecho, en septiembre del año pasado, Golden Boy reconoció que debían 1 millón 375 mil dólares que, de cualquier forma, no pagaron a Golovkin.
Se trata de otro escándalo en la empresa del promotor de origen latino más importante que ha tenido el pugilismo. Desde 2002, Golden Boy Promotions se convirtió en una empresa con crecimiento exponencial que generó mucho dinero y logró tener en sus filas a importantes peleadores, que con el tiempo se han ido.
Uno de ellos, Saúl “Canelo” Álvarez, quien rompió un contrato por 365 mdd en 2020, bajo el argumento de que De la Hoya había descuidado el negocio por problemas de adicción. Se trata de un negocio con enorme potencial, que se está cayendo en las manos del “Golden Boy”.
El siguiente emporio del boxeo, que no termina de cuajar
En 2002, Óscar de la Hoya aportó la fortuna que consiguió durante su carrera para fundar Golden Boy Promotions, Inc. La empresa se capitalizó con otros ex boxeadores como Bernard Hopkins, Joseph Ochoa o Ricky Hatton.
Cinco años después, la promotora alcanzó el récord de ventas más de 2 millones de ventas en pago por evento (PPV por sus siglas en inglés) y de repente se convirtió en una de las promotorías más respetadas en el mundo. Sus peleas se han transmitido por cadenas como HBO (que eventualmente salió del negocio), Showtime, Telefutura y ESPN.
Y también participa en la promoción de funciones de otras promotoras como Top Rank (de Bob Arum), Main Events, Gary Shaw Productions, Lou Dibella, Murad Mohammad, etc. Incluso, la empresa es propietaria del 25% de las acciones del Houston Dynamo de la MLS.
Uno de sus mayores logros fue la función “Super Fight”, celebrada el 5 de mayo de 2007, entre el mismo De La Hoya y Floyd Mayweather, Jr. en el MGM Grand en Las Vegas, Nevada. Mayweather ganó el pleito por decisión dividida, pero De la Hoya se embolsó 20 mdd.
Para diciembre de 2008, en sociedad con Top Rank, De la Hoya se despidió del cuadrilátero enfrentando al filipino, Manny Pacquiao, en la función: The Dream Match. La pelea tenía una gran diferencia de talla y alcance en favor del mexicoamericano, pero ya era un veterano y subió lento y sin poder para enfrentar al filipino, que estaba en la cúspide de su carrera y le dio una golpiza.
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El resultado fue similar: Pacquiao ganó cuando De la Hoya ya no saltó para el noveno round, pero la función generó 70 mdd, solo en ganancias por derechos de televisión en EEUU.
Además del boxeo, Golden Boy ha intentado incursionar en otros negocios. En 2005, se asociaron con Affliction Clothing para promover funciones de artes marciales mixtas. Sin embargo, no han tenido éxito. En ese año también fundaron Golden Boy Partners, que busca el desarrollo urbano de comunidades latinas. En menos de una década, la empresa ya era un consorcio.
La relación disfuncional de Golden Boy y “Canelo” Álvarez
El 1 de mayo de 2010, Golden Boy dio uno de sus golpes mediáticos más importantes, cuando firmaron a Saúl “Canelo” Álvarez para enfrentar al boricua Miguel Cotto en el duelo coestelar de una función entre Floyd Mayweather Jr. y Shane Mosley en Las Vegas.
Esta relación permitió al peleador tapatío catapultarse en el mercado estadounidense aprovechando su potencial como boxeador, hasta convertirse en el mejor libra por libra del mundo. En esta relación, el púgil mexicano enfrentó a gente como: Shane Mosley, Floyd Mayweather, Erislandy Lara, Julio César Chavez Jr., Gennady Golovkin o Sergei Kovalev.
“Canelo” también respaldó a De la Hoya cuando su CEO, Richard Schaefer, dejó la empresa el 2 de junio de 2014 y se llevó consigo a muchos de los peleadores que estaban firmados por Golden Boy. Uno de ellos sería el propio Álvarez, quien declaró: “yo fui el único boxeador que se quedó porque soy un hombre leal”.
Aunque posteriormente reconoció:
“Luego entendí por qué todos se habían ido y por qué Richard se fue. Los que están en Golden Boy solo buscan su propio beneficio, no el de los boxeadores”
“canelo” álvarez
En octubre de 2017, gracias al apoyo de De la Hoya, Álvarez firmó el contrato más jugoso en la historia del deporte profesional por 5 años y 365 mdd a cambio de 11 peleas. Pero así como el tapatío anunció con gran emoción su nuevo contrato, también conmocionó al mundo del boxeo el 6 de noviembre de 2020, cuando obligó a DAZN ya Golden Boy a romper la relación.
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En una entrevista con el portal Sport In Depth “Canelo” acusó a “Golden Boy” de “no hacer nada productivo por la compañía y que se la pasa dedicándose a otras cosas ajenas a la representación de sus boxeadores”. Y señaló que De la Hoya había abandonado su negocio por un problema de alcohol, sin preocuparse por los boxeadores.
“No me gusta hablar mucho de la gente, pero siempre he sido una persona muy leal. Siempre lo fui con Golden Boy. Óscar de La Hoya no es Golden Boy. Él no hace nada, se está preocupando por tomar y andar en otras cosas”.
“Canelo” se excusó señalando que De la Hoya lo mantuvo congelado durante 2020, a causa de la pandemia y quería obligarlo a una tercera pelea contra GGG. Al final de cuentas, transcurrió casi todo el año y el tapatío no tuvo ninguna pelea. Por eso entabló una demanda multimillonaria por incumplimiento de contrato y al final se negoció un acuerdo para permitirle al mexicano salir del contrato.
En diciembre de 2020, Álvarez firmó con Eddie Hearn y Matchroom Boxing por 100 mdd, mientras Golden Boy Promotions perdió a su activo más importante.
La versión de De la Hoya y su problema de adicciones
De la Hoya tardó un año y medio en dar su versión sobre el rompimiento de la relación con “Canelo” en una entrevista para La Opinión de Los Angeles, a principio de marzo. Explicó que, el manager del peleador mexicano, Eddy Reinoso fue el responsable del rompimiento.
“Yo creo que una vez lo critiqué diciendo en los medios que Eddy Reynoso necesita ayuda para, quizás, mejorar el estilo de ‘Canelo’ un poco más: que suba la mano, que no alce la cabeza cuando tira el gancho. Lo critiqué un poquito y eso creó tensión”
óscar de la hoya
Mientras que hace unos días, Golden Boy dio más detalles sobre el problema, en una entrevista con BoxingScene: “Lo critiqué un poquito y eso creó tensión, porque Eddy y ‘Canelo’ son mejores amigos. Así que lo que yo diga de Eddy le va a doler al ‘Canelo’. No estoy seguro, pero yo creo que eso es lo que comenzó la pelea”, indicó.
“No critique a Eddy Reynoso, pero sí decirle a ‘Canelo’ qué tal vez debía usar a un entrenador distinto o a alguien diferente que le pudiera enseñar nuevas técnicas, así como yo cambié de entrenador y cómo Ryan García lo está haciendo ahora”.
“En una de esas noches en que estaba borracho, me pregunté: ‘¿Vale la pena seguir viviendo?’”, explicó el Golden Boy, quien aseguró que ha tratado de recuperar su carrera como empresario y que su adicción a las drogas ha sido uno de los retos más importantes de su vida.
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Pero lo que De la Hoya no había aclarado era su supuesto problema de adicciones y el abandono a la empresa que le estaba danto tantas ganancias y muchos problemas. Sobre este tema, De la Hoya habló el pasado jueves en el podcast “Un round más”, de Erik “Terrible” Morales.
“Empecé a juntarme con gente mala, encontré drogas, mi vida se estaba yendo para abajo. Me costó un chingo de tiempo. Mi pelea más difícil fue contra las drogas”, dijo. “Cuando me retiré sentí que algo de mí se fue, mi alma, no sé. Siempre me sentí vacío, solo. El boxeo era mi amor. Pensaba que si no tenía el boxeo no tenía nada”.
Incluso señaló que Richard Schaefer estuvo cerca de despojarlo de Golden Boy, cuando ingresó a una clínica de rehabilitación. De acuerdo con el mexicamericano, tenía un día internado y estaba medicado cuando Schaefer lo visitó para pedirle que firmara unos documentos.
“Me dijo que el boxeo no era lo mío, que pensara en mi familia y lo dejara. Que había un comprador de la compañía por 100 mdd. Yo en ese momento estaba casi muerto, como un zombi, no podía pensar bien e iba a firmar”
óscar de la hoya
Entonces De la Hoya pidió tiempo para revisar los documentos con sus abogados, por lo que el socio se molestó. Los abogados le explicaron que él solo recibiría 3 mdd y esto provocó la ruptura de la sociedad en 2014.
Han pasado casi ocho años desde entonces, sin embargo, Golden Boy sigue teniendo problemas administrativos y si no encuentran nuevo talento de gran peso, podría fracasar una empresa que en su momento tenía un gran potencial.
