Con un golazo de Julio Furch, Atlas ganó en Ciudad Universitaria, ante unos Pumas que perdieron toda la garra que mostraron ante América

El Atlas está más cerca que nunca en 22 años, de volver a disputar un título, tras la sequía más larga en la historia del futbol mexicano de 70 años de espera. Lo Rojinegros visitaron el Olímpico Universitario y maniataron a unos Pumas manzos, que salieron a disputar la semifinal de ida del Grita México A 21, como su fuera un partido de la jornada 2, para quedarse con el triunfo por 0-1, con un golazo de Julio Furch.

El equipo local mostró una cara completamente distinta a la que tuvo el sábado en el Estadio Azteca, para dejar fuera al líder general, América. Ahora, lucieron como el 11 de la tabla, que calificó, apenas al Repechaje. Además, cortaron una racha de cuatro victorias en sus últimos ocho partidos.

El Atlas jugó a esperar que lo ofendieran, sabiendo que el equipo universitario no tiene mucha profundidad y así logró controlar el partido, con cierta facilidad, ante un rival que nunca decidió detonar el partido para provocar alguna acción de peligro importante, sino hasta la recta final del partido.

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Así, aunque Pumas dominó el tiempo de posesión, con el 55% del tiempo y generó 15 llegadas, solo pudo disparar en tres ocasiones a puerta. Mientras el equipo tapatío tuvo nueve llegadas y cuatro disparos a puerta, incluido el tanto del triunfo, que cayó cerca del descanso.

En la jugada, Camilo Vargas, sacó la pelota desde el fondo, en un despeje largo. Furch bajó el balón cerca de tres cuartos de campo y, en dos toques, Julián Quiñones le devolvió una pared fuera del área. El delantero argentino la tomó como venía, y empalmó sabroso, para sacar un disparo potente que se pegó en el poste izquierdo de Alfredo Talavera y se incrustó en el marco, para el único tanto, al minuto 43’.

El complemento fue similar, Atlas controlando el encuentro y Pumas sin idea.

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Solamente hubo una jugada importante en el agregado, cuando Juan Ignacio Dinneno habilitó a Igor Meritao en el área y lo dejó mano a mano frente a Camilo Vargas. Sin embargo, el arquero colombiano aguantó en la salida y detuvo el disparo.

Ahora, Pumas deberá ganar por diferencia de dos goles el domingo en el Estadio Jalisco, para aspirar a la Final. Mientras el Atlas cuenta con la ventaja del empate global para avanzar a su primera final desde 1999.