Giants estuvo al frente hasta el inicio del último cuarto y lograron ponerse a dos puntos, faltando 28 segundos por jugar, pero fallaron la conversión para lograr el empate
Los Giants de Nueva York llevaron al límite a los favoritos Buccaneers de Tampa Bay, sin embargo, Tom Brady encontró el hechizo suficiente para lograr que los Bucs lograran salir con vida de casa de los Giants, con marcador de 25-23 en partido que dio fin a la semana 7 de la NFL.
La ofensiva de los Giants convirtió 3 de 6 en cuarta oportunidad, incluyendo dos en la última serie ofensiva del partido, además de un extraordinario pase de Daniel Jones para Golden Tate de 19 yardas, para poner el partido 25-23 con 28 segundos por jugar.
Sin embargo, en la conversión de dos puntos para empatar el encuentro, envió un pase corto al corredor, que pudo ser marcado como interferencia, con lo que el partido se definió en favor de los Bucs.
Puedes leer: El día que Philly aplaudió la lesión que retiró a Michael Irvin
Los Giants estuvieron al frente hasta el inicio del último periodo, con marcador 17-15.
Tom Brady tuvo un buen partido. Completó 28 de 40 pases, para 279 yardas, con dos anotaciones y completó envíos con ocho receptores diferentes, particularmente con Mike Evans y Jaydon Mikens, quienes tuvieron cinco recepciones cada uno.
Lee también: “Nunca más”, el oscuro origen del mote de los Ravens de Baltimore
Por NY, Daniel Jones completó 25 de 41 envíos para 256 yardas, con dos de anotación y dos intercepciones. Sterling Shepard tuvo ocho recepciones para 74 yardas, Evan Engram consiguió cinco atrapadas para 61 yardas y Darius Slayton tuvo otras cinco recepciones con 56 yardas.
Con el triunfo, Tampa Bay mejora a 6-2, para mantenerse en el liderato del Sur de la Conferencia Nacional y número dos de la Conferencia. Mientras que los Giants se pusieron 1-7, para tener la peor marca de la NFC.
