Jennifer logró completar la prueba en menos de 12 horas, el tiempo límite que ella misma se fijó, y logró un tiempo menor, de 11 horas y 50 minutos
La corredora norteamericana Jennifer Smith pesa alrededor de 156 kilos. Sin embargo, logró cumplir una de las pruebas atléticas más demandantes y desgastantes que existen en el deporte: correr un maratón.
Jennifer logró completar la prueba en menos de 12 horas, el tiempo límite que ella misma se fijó, y logró un tiempo menor, de 11 horas y 50 minutos. Además, durante su trayecto contó con el apoyo de toda su familia.
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El camino fue complicado para Jennifer porque, encima de su peso, en 2013 sufrió un accidente y casi pierde una de sus piernas.
Además de conseguir su marca, se convirtió en la mujer más pesada del mundo que logra completar esta distancia, tomando en cuenta el reto que implica para su organismo mover toda esa masa de manera continua durante tanto tiempo, lo cual es sumamente desgastante para su sistema musculoesquelético y su metabolismo.
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Un premio adicional fue que la competencia le permitió quemar 4000 calorías.
El anterior récord pertenecía a la corredora Ragen Chastain, con 130 kilos.
Entrenamiento especializado
El programa de entrenamiento de Jennifer fue de 1 año, asesorada por la Mainly Marathons Heartland Series en Clinton, con sede en la ciudad de Iowa, que no tiene límite de tiempo para completarla.
Requirió de una aprobación médica para poder correr, se sometió a una dieta especializada para quemar su exceso de grasa. Además, contó con el aval del libro Guinness World Records, para darle el visto bueno, en caso que lograra terminar el evento.