Bajo la dirección de Israel Hernández Pat, Celaya solo ha perdido un partido en su fase regular entre el Guard1anes 2020 y lo que va del 2021
El martes 10 de agosto del 2010 Israel Hernández Pat posteó la primera entrada de su blog, hace ya casi 11 años de aquel día. Lo hizo en Blogspot. En diciembre del 2011 fue su último posteo, pero todavía la dirección del sitio web (que hace 11 años no actualiza) es parte de su biografía en su cuenta de Twitter donde ni siquiera tiene más de 300 seguidores. Pero algo es verdad: los números dicen que es el mejor entrenador en la corta vida de la Liga de Expansión.
Por aquellos años del 2010 entraba de lleno a lo que le apasiona: la táctica, la estrategia, los números, el análisis de datos. Eso es Israel. También es un inquebrantable espíritu de mejorar siempre y en todo momento. Ahora es técnico del Celaya y para ser sinceros si no existiera la Liguilla el mejor club de Expansión, por mucho y con números en mano, es el suyo.
En realidad el club bajo su dirección solo ha perdido un partido en su fase regular entre el Guard1anes 2020 y lo que va del 2021. Hoy le respetan. También le conocen.
Las personas que lo conocen o están cerca de él dicen que tiene un espíritu inquebrantable y que a sus más allegados siempre les dice que quiere ser el “mejor técnico del mundo”, no lo ha dicho una vez, lo ha mencionado muchísimas.
Israel trabajó en el análisis de rivales bajo el mandato de Sven Goran Eriksson en la selección mexicana en 2009. Tiene su título de entrenador pero entiende que la tecnología y el software son parte determinante en la actualidad para ganar partidos.
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No fue un jugador muy conocido. Estuvo en Pumas, Atlante, San Luis. Luego el reconocimiento y método de trabajo le fueron abriendo las puertas en varios equipos. Se volvió un especialista en trabajar y generar talento para el futbol mexicano.
Celaya es la primera gran oportunidad que tiene para encabezar un proyecto en el futbol profesional mexicano en un primer equipo. Antes estuvo en clubes más grandes como América o Cruz Azul pero en la Sub-20, además de un paso por Santos y tuvo algunos encuentros que dirigió como interino y nada más.
Su filosofía de trabajo la resume Daniel Habif, emprendedor mexicano y líder del movimiento ‘Inquebrantables’, que consiste en motivar a las personas a encontrar sus flaquezas, aprender de sus errores y convertirlos en fortalezas. Israel Hernández Pat comparte esa filosofía, la retoma y la potencializa para él y su equipo.
Hace unas semanas el entrenador mexicano compartió una frase para resumir cómo visualiza el trabajo: “Esta inquebrantable y sana necedad de conseguir el éxito. No me rindo”. Es como un mantra. También hace poco resumió su método en una especie de ‘ecuación’: “actitud+disciplina+pasión”.
Es evidente, los números lo avalan, pero pasar el fin de año y comenzar el 2021 no fue fácil. Llegaba a la liguilla del Guard1anes 2020 como favorito porque fue primero de la general y perdió ‘sorpresivamente’ (porque no hay otra forma de definirlo) ante Tampico en las semifinales.
No fue fácil retomar el camino, pero Celaya lo ha hecho. Este torneo no ha perdido y también (otra vez) es líder general. La última derrota que tuvo su equipo en temporada regular fue el 3 de noviembre pasado cuando cayeron 1-0 ante Tapatío.
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Israel es un entrenador atípico, le contaba hace unos meses al departamento de comunicación de la Liga de Expansión que sus métodos de trabajo son atípicos, que le gusta que sean sesiones cortas y casi siempre con el balón. También es un técnico que le gusta compartir: hace unas semanas (lo que casi no hacen los entrenadores de futbol profesional) dio una charla a los periodistas para explicarles cómo trabaja el club, qué herramientas usan, cómo es un día a día, temas de futbol-cancha como le llaman los expertos.
No es fácil llegar a dirigir a un club de las dos ligas profesionales en México. Solo hay 34 vacantes y el resto de técnicos reconocidos y los que no tiene que buscar acomodo en la Liga Premier o Tercera o como auxiliares o en la Sub’s. A Israel le costó más de 10 años conseguir un puesto, una década para que alguien confiara en su trabajo y le diera una oportunidad para lograrlo.
Hay una frase que repite constantemente con su círculo cercano. “Trabajar hasta ser el mejor técnico del mundo”. ¿Imposible? El camino y el proceso, dicen los especialistas en coaching mental, es probablemente lo mejor que le puede ocurrir a las personas, aunque no lleguen a esa meta. Israel dice que sueña con llegar allí, a lo más alto. Desde afuera parece un camino muy largo, difícil…
“Es un técnico que tiene mucho potencial y me ha sorprendido gratamente, tiene ideas claras, se compromete con el equipo, nos impulsa, es un gran entrenador”, comenta Leobardo López, jugador del club y capitán.
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Ser entrenador, dice Israel, conlleva más que trabajo en la cancha. Es soportar que te digan qué hacer y cómo hacerlo, porque “todos llevamos a un técnico dentro y siempre tenemos la razón”, pero sobre todo, el entrenador de Celaya dice que eres además de estratega, “amigo, compañero, eres muchas cosas que van más allá de la cancha”. Es más “que mover fichitas”.
¿Qué tan clavado es Israel con su trabajo? Un ejemplo para explicarlo. En la fecha 1 del torneo pasado cuando llegó al hotel se dio cuenta que llevaba lo necesario para dirigir: su pizarrón, tablet, computadora, todo… menos su ropa para salir a dirigir ante Dorados un día después. Lo resolvió, salió a comprarse ropa. El futbol le ocupa mucho tiempo.
