A partir de 1990 con Ivo Basay, el Necaxa ha adquirido los servicios de 24 futbolistas chilenos, quienes generalmente han dado resultados
A media semana, la directiva del Necaxa anunció la contratación de sus primeros tres jugadores chilenos para el próximo torneo: Angelo Giovanni Araos, Jorge Valdivia y Gonzalo Jara. Además, el América liberó a Nicolás Castillo y también se encuentra a prueba en Aguascalientes. No es novedad que el equipo que dirige actualmente Pablo Guede reclute jugadores andinos cada temporada baja, pues históricamente consigue buenos dividendos.
Con estas tres adiciones, en total son 23 y podrían ser 24 futbolistas chilenos que han vestido la camiseta albirroja. habían vestido la camiseta de los Rayos.
Su primer refuerzo y, probablemente su mayor éxito, ha sido Ivo Basay, quien fue pieza clave como centro delantero para el bicampeonato de los años 90. El delantero jugó en Necaxa en dos etapas: 1990-1993 y 1994-95.
En ese periodo anotó 109 goles, ganó el título de goleo de la temporada 1992-‘93, con 27 anotaciones y se convirtió en un buen negocio para la directiva, pues fue vendido al Boca Juniors, donde ganó para ser campeón en 1994 y volvió a la Ciudad de México para conquistar la primera Liga del “Equipo de la Década”. De hecho, actualmente es el segundo goleador histórico para la institución. en toda la existencia de la institución.
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En aquella época compartió con Eduardo Vilches y Rodrigo Barrera, quienes tuvieron un paso mucho más discreto.
Para el inicio del presente siglo, llegaron el delantero Cristián Montecinos, quien tuvo buenos momentos; así como Nelson Parraguez, Gamadiel García y el defensa Ricardo Rojas. Todos con un rendimiento regular con un equipo que vivía una época complicada.
A partir del 2014, comenzó una nueva oleada de fichajes andinos, en un equipo que volvía desde el Ascenso y buscaba consolidarse en la Liga MX, con un proyecto de contratar a buen precio y vender a uno mucho mejor, para fortalecer las finanzas del equipo.
El primero de ellos en llegar fue el polifuncional Luis Felipe Gallegos, seguido de Marcos González, Manuel Iturra, Edson Puch, Matías Fernández y Claudio Baeza, quienes fueron un buen negocio para los hidrocálidos.
Más recientemente, destacan nombres como: Mauro Quiroga, del CDP Curicó Unido y Yerko Leiva, reclutado del Unión La Calera; Fernando Meza y Bryan Carvallo del Colo Colo. Mientras que Víctor Dávila y Carlos González, llegaron del Huachipato. Finalmente, Nicolás Maturana y Felipe Gallegos llegaron de la U de Chile, así como Igor Lichnovsky, surgido de la U de Chile.
Aunque también llegaron otros nombres que no tuvieron un desempeño importante, como Martín Lara, Pedro Campos, Juan Delgado.
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Además de su desempeño en el campo, el Necaxa ha sacado muy buenas ganancias de sus compras en la liga chilena:
- Víctor Dávila a Pachuca: 12 millones de dólares (mdd)
- Brian Fernández (Argentina) a Portland Timbers (MLS): 10 mdd
- Mauro Quiroga a Atlético de San Luis: 4 mdd
- Carlos González (Paraguay) a Pumas: 3.1 mdd
Los flamantes refuerzos
Esto es lo que presumen los refuerzos chilenos que recién llegan a Aguascalientes, donde los espera un viejo conocido del futbol chileno, Pablo Guede, quien trabajó en el banco de Palestino y Colo Colo.
“El Mago” Valdivia regresa a la actividad después de trabajar como comentarista de televisión. Su último club fue el Corinthians, donde llevo como gran contratación, tras un paso relevante por la Universidad de Chile, pero nunca pudo consolidarse. Valdivia y Guede además son amigos.
Araos, por su parte, llega procedente del Antofagasta y, con 24 años, llega al equipo en compra, con contrato por tres temporadas. Se desempeña como mediocampista ofensivo, para partir desde el centro del campo o jugar como volante por fuera. También jugó con la Universidad de Chile y con el Corinthians.
La relación de Necaxa y futbolistas chilenos
Pero no solo hay una relación estrecha entre Necaxa y el futbol chileno para reclutar jugadores. Incluso existe un antecedente de un partido amistoso entre los antiguos Electricistas y la Selección Chilena, jugado el 1 de mayo de 1966, como parte de un torneo cuadrangular disputado en el estadio Olímpico Universitario.
Necaxa se impuso a La Roja con un gol del mediocampista brasileño Javan Marinho: al minuto 12, ante cerca de 50 mil, con arbitraje del mexicano Héctor Ortiz. Aunque el equipo chileno lucía más peligroso en el campo.
La Selección Chilena se preparaba para participar en el Mundial de Inglaterra, luego de ser anfitrión en la Copa anterior. Sin embargo, su participación fue decepcionante, al fondo del grupo D, con un empate ante Corea del Norte y derrotas ante Italia y la URSS.
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Las alineaciones de aquel partido fueron:
Necaxa: Ovejero (argentino); Reynoso, Majewski (uruguayo) Albert y Pérez; Romo y González; Baeza, Juárez (argentino), Marinho (brasileño) y Peniche.
CHILE: Godoy; Valentini, Contreras, Figueroa y Villanueva; Prieto y Rojas; Foulloux, Tovar, Ramírez y Sánchez.
