Alex Smith sufrió una terrible fractura en la pierna, que casi le cuesta la vida. 17 operaciones después regresó al campo, se convirtió en titular y llevó a su equipo a playoffs
El 18 de noviembre de 2018, Alex Smith, quarterback de los entonces Redskins de Washington, sufrió una terrible fractura expuesta en su pierna derecha, cuando fue tackleado por por Kareem Jackson y J.J. Watt de los Texans de Houston. Su pierna se atoró y tronó como si fuera una vara.
Aunque los pronósticos médicos inicialmente fueron alentadores, la realidad es que Smith se tardó casi dos años en volver a jugar y, para llegar a ese punto tuvo que someterse a una larga serie de operaciones, una infección en la herida que casi le provoca la muerte y una larga y dolorosa rehabilitación.
Pero no solo salvó su pierna y volvió a caminar, regresó al campo, condujo a su equipo a los playoffs y se ganó el respeto de toda la Liga, gracias a su pundonor. Al grado que dos semanas antes, la Asociación de Escritores Profesionales de EEUU (PFWA, por sus siglas en inglés), le otorgó el reconocimiento como Regreso del Año y ganó el respeto también del mejor quarterback de todos los tiempos, Tom Brady:
“Oye, estoy tan orgulloso de ti, hermano. Estás jodidamente increíble, ¿sabes qué? Eres una inspiración para todos nosotros. Eres increíble. Siempre estaré aquí si me necesitas”, le dijo el GOAT, luego del partido en la Ronda de Comodines donde los Buccaneers vencieron al equipo sin nombre, y donde Smith no pudo jugar por una lesión en la pantorrilla.
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Antes de ese partido, aun sin saber si Smith podría jugar, el coach de los Bucs, Bruce Arians declaró: “Cuando Alex Smith juega, ellos tienen un tremendo equipo. Son un equipo muy bien dirigido, con muchísimo talento defensivo. Es realmente la clave de todo”.
Pero también reconocieron su esfuerzo Doug Pederson, entonces coach de los Eagles de Philadelphia y coincidió con Smith en los Chiefs de Kansas City, así como Zac Taylor, head coach de los Cincinnati Bengals, destaca también la eficacia de Smith.
En 2020, Smith se hizo de la titularidad luego de la baja de juego de Dwayne Haskins y una lesión que dejó fuera a su suplente, Kyle Allen. Pero su presencia fue decisiva para que el equipo avanzara a los playoffs en la División Este de la Conferencia Nacional
Y aunque el record del equipo fue perdedor (7-9), Smith ganó cinco de esos partido, tuvo el mejor porcentaje de pases completos de su carrera (66.7%) y sobre todo, le dio a todos los jugadores, coaches, aficionados y periodistas una lección de vida.
La lesión
En 2018 los Redskins tenían buenas posibilidades de llegar a playoffs, con marca de 6-3 eran líderes divisionales. Al jugar su décimo partido del año, se enfrentaban a unos Texans enrachados, que se pusieron en ventaja por 10 puntos. En un 3º y 9 con 7:52 en el tercer cuarto Alex Smith fue atrapado por dos linieros. Su pierna derecha quedó atrapada y se dobló de manera violenta provocando así una fea fractura.
Washington perdió 23-21 el partido y la temporada se vino abajo con la lesión que dejaría fuera del campo a su quarterback titular por el resto del año. En ese momento comenzó la pesadilla para Alex Smith y su familia. El diagnóstico era una fractura de tibia y peroné, por lo que requeriría cirugía, que aparentemente fue exitosa.
El problema es que se contaminó con una bacteria llamada fascitis necrosante o comúnmente llamada “bacteria carnívora”, pues necrosa el tejido vivo. Smith tuvo que ser operado de emergencia nuevamente.
“Elizabeth, estamos haciendo todo lo posible. Y ahora mismo, nuestra primera prioridad es salvarle la vida. Luego haremos todo lo posible por salvar su pierna. Cualquier cosa más allá sería un milagro”, recuerda la esposa del jugador, sobre el pronóstico que le dio el doctor tras conocer la infección.
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De hecho, le explicaron que este tipo de lesión se parecía más a la de un soldado en combate, que a la de un jugador profesional. Smith sobrevivió y los doctores lograron salvarle la vida, luego de 17 operaciones. Entonces comenzó el lento y doloroso proceso de rehabilitación.
El 23 de septiembre de 2019, Alex Smith regresó, ya sin muletas, al estadio donde se lesionó, el FedEx Field, antes de eso, narró su historia en un documental de la cadena ESPN llamado “Project 11”, donde explica el duro camino que recorrió para volver y que sus doctores calificaron como el “milagro de Alex Smith”.
El regreso a los emparrillados
Eso no fue suficiente para el quarterback originario de Seattle, Washington. Pese al impacto de la lesión y sus consecuencias, su objetivo siempre estuvo claro: regresar al emparrillado, pero el camino no sería fácil. El nuevo coach del equipo, Ron Rivera, tenía como titular al joven de segundo año, Dwayne Haskins y el suplente sería Kyle Allen.
A mediados de año recibió la autorización médica para practicar, la aprovechó para quedarse con el equipo, regresó a jugar y volvió a ganar.
Como tercero en la lista, Smith tuvo pocas repeticiones con el equipo titular, durante la pretemporada. Pero al comenzar la temporada, Haskins fue enviado a la banca por su bajo rendimiento, Allen se convirtió en titular y Smith ya era el suplente.
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El 11 de octubre de 2020, el futbol americano le devolvió a Smith el lugar que perdió tan injustamente. Entró al partido, tras una lesión de Kyle Allen, mientras su mujer y sus hijos aplaudían en la tribuna. Minutos después observaban angustiados el partido. Era el resultado de tantas lágrimas y esfuerzo. El sueño se cumplió y Alex ya se podría retirar.
No importó el resultado del partido, Washington perdió en casa 10-30, ni el de Smith en el campo: solo completó nueve pases para 37 yardas y soltó un balón.
Por necesidad del equipo (Haskins y Allen estaban lesionados) Alex Smith regresó como titular en la Semana 8 y completó 24 de 32 pases para 325 yardas, pero dos intercepciones, en una nueva derrota, ahora ante los Giants, también en casa. Una semana después, Washington cayó en su visita ante Detroit 27-30, pero el pasador puso cifras máximas en su carrera, tanto en intentos (55), pases completos (38) y yardas por pase (3909, su segundo partido con más de 300 yardas.
Posteriormente, vinieron cinco victorias consecutivas ante: Cincinnati, Dallas, el entonces invicto Pittsburgh, San Francisco y Philadelphia. El equipo se levantó de un récord de 2-7 a un 7-9, suficiente para ganar su División.
Para recordar el pasado, la familia de Álex construyó un balón de metal, con los aparatos ortopédicos que tuvo durante tanto tiempo en la pierna derecha.
El porvenir de una historia de película
Antes del inicio de esta temporada, la prensa lo cuestionó a Smith sobre si vería una película basada en su historia: “Claro que no”, dijo. “No la vería”. Su argumento, que ya lo había vivido todo en la vida real y no necesitaba recordar el doloroso camino de regreso al futbol.
“Una vez que estás ahí y que suena el silbato, hay que entender que todo se orienta a los resultados. Uno tiene que rendir cuentas ante sus compañeros y entrenadores. Todas las personas en este edificio dependen de uno. Al final, una vez que uno entra en el terreno, será mejor que obtenga los resultados”, dijo Smith luego de regresar a la titularidad, asumiendo la responsabilidad de su posición, sin justificarse por un momento en su historia, ni sus 36 años.
A cambio, Alex Smith se convirtió en apenas el quinto quarterback en la historia de la NFL que ha guiado a tres diferentes equipos hasta los playoffs, con los 49ers de San Francisco 49ers, los Chiefs de Kansas City y el equipo sin nombre.
Ahora, su futuro está en duda, pese a que tiene contrato por dos años más. Luego de la eliminación del equipo, Smith declaró que analizará su futuro junto con su esposa.
“Me divertí mucho este año, estar de regreso en el vestidor y en el campo, jugando algo que amo y el poder perderte en ese sentimiento es uno de las sensaciones más gratificantes que existen en el mundo… Mi esposa ha pasado por demasiado, mi familia también”, señaló.
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Mientras que su coach, adelantó que la prioridad del equipo para la siguiente temporada es elegir al quarterback titular, por lo que se reunirá con el dueño del equipo, Dan Snyder, para definir el futuro de la posición en los próximos años y esto incluye a Smith, aunque señaló que lamentaría dejar fuera a su líder para esta temporada.
“Odié hacérselo a Alex, pero fue para lo mejor. Alex fue increíble; créanme, es un gran hombre”, dijo el coach sobre su decisión para esta temporada.