Roblox es uno de los videojuegos más jugados del planeta, uno de tantos que durante mucho tiempo pasa desapercibido para la mayoría de jugador, pero que entre el público más joven es todo un éxito. Roblox cuenta con más de 3000 millones de usuarios. Una cifra al alcance de muy pocas cosas en la historia de la humanidad, pero que sorprenden todavía más si tenemos en cuenta que de ese número más de la mitad son menores de doce años.
La libertad, casi, sin límites
Una de las mayores virtudes de Roblox es su infinito número de posibilidades, y es que en el juego el límite lo pone nuestra investigación. Es por ello que sus desarrolladores han tenido que tomar cartas en el asunto en muchas ocasiones. Prohibiendo por ejemplo que se puedan realizar determinadas muestras de afecto, que la mayoría de personas verían de forma natural, pero en un juego tan lleno de posibilidades podrían acabar conllevando a la creación de posible material de carácter obsceno.
Roblox trata de sacar la máxima creatividad posible de cada persona, pero ha sido acusado de ser perjudicial para su público mayoritario: los niños.
Se trata de People Make Games, un canal de YouTube que cuenta historias sobre el mundo del videojuego. Hace unos meses sacaron un vídeo en el que acusaban a ROBLOX Corporation de aprovecharse de la creatividad de los niños como modelo de negocio, material por el que fueron criticados y presionados para borrar el vídeo, algo que no solo no aceptaron, sino que les incentivó a investigar más profundamente.
¿Es Roblox peligroso para los niños?
Al igual que la gran mayoría de videojuegos no lo es ni debería serlo, pero hecha la ley, hecha la trampa. Las infinitas posibilidades y que no todo esté moderado provoca que dentro del propio juego exista desde un mercado negro, hasta abuso laboral por parte de otros usuarios.
La venta de ítems digitales recuerda a todo lo que está ocurriendo en torno a los NFT, con Roblox quedándose un gran porcentaje de las ventas. Existen grupos creados específicamente para desarrollar material dentro del juego y venderlo.
Un negocio multimillonario en el que si tenemos en cuenta todo lo expuesto en el citado reportaje, habría que controlar mucho más todo lo realizado en él, pues puede llegar a límites muy perjudiciales.