Derrick Rose era una de las grandes promesas de la NBA hace una década, cuando ganó el MVP hoy ha resurgido con los sorprendentes Knicks
Este domingo, los Knicks de Nueva York se consolidaron como uno de los equipos poderosos de la Conferencia Este, luego que consiguieron un sorpresivo triunfo en casa de los Clippers de Los Ángeles, algo que no ocurría desde el 2010. Con un marcador de 106-100, el equipo del Bronx se afianza como el cuarto sembrado, solo detrás de los 76ers de Philadelphia, los Nets de Brooklyn y los Bucs de Milwaukee.
La estrella de la tarde no fue Julius Randle, quien normalmente carga con el equipo, sino Derrick Rose, una figura que se resiste ante el paso del tiempo y está teniendo una temporada como en sus mejores años, justo una década después que fue nombrado el MVP más joven en la NBA.
Solo en la primera mitad, Rose jugó 17 minutos y marcó 19 puntos, siete asistencias, tres rebotes y un 90% de efectividad en tiros de campo. Después volvió a marcar hasta el inicio de del último cuarto. Al final, jugó 32 minutos, anotó 25 puntos, ocho asistencias, seis rebotes y un robo, con dos triples en tres intentos.
Los Knicks tienen una marca de 38-30 y el fichaje de Rose ha sido fundamental para que el equipo esté firme en los playoffs, por primera vez desde 2013. En siete años, el equipo había ganado 32 partidos como máximo en una temporada. De hecho, solo ganaron ganó 21 juegos.
Anoche, la defensa de los Clippers anuló a Randle, quien solo marcó 14 puntos con 14 rebotes y el equipo corría el riesgo de acumular su tercera derrota seguida. Entonces emergió la figura de Rose, quien se confirmó como una gran adición, pues de la mano del coach Tom Thibodeau ha mostrado su mejor versión en cinco años.
A una década del MVP
Con su victoria de ayer, los Knicks tienen un 98,4% de probabilidad de llegar a playoffs esta temporada. El equipo es la sorpresa de la Liga y una de las mejores versiones en la historia de la franquicia. De hecho, al inicio de la temporada los expertos pronosticaban que solo conseguirían 21 victorias y serían el tercer peor récord en el Este.
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Ahora no solo volverán a los Playoffs y probablemente recibirán la primera serie en casa. Allí es donde el papel de Rose cobra relevancia en el equipo, pues además de su excelente nivel, es el jugador más experimentado con 32 años. Además, está acostumbrado a jugar en estas instancias, como ocurrió en sus primeros años con los Bulls de Chicago. Un detalle fundamental ante un equipo plagado de jóvenes y carente de experiencia.
El 3 de mayo de 2011, con tan sólo 22 años, Rose tuvo una temporada de ensueño con los Bulls, cuando se convirtió en el jugador más joven en la NBA en ser nombrado MVP, con promedios de: 25.0 puntos, 7.7 asistencias y 4.1 rebotes por partido. Rose fue el primer jugador en Chicago en ganar este reconocimiento después de Michael Jordan en 1998. De hecho, Rose y Jordan son los únicos jugadores en ganar el premio Novato del Año y MVP con los Bulls.
El factor Derrick Rose en el Bronx
De la mano de Rose como líder de la segunda unidad del equipo, los suplentes de Nueva York están entre los equipos más competitivos de la Liga, así como la mejor defensa. Llegó al equipo en cambio el 8 de febrero, porque pese a la edad y las lesiones, Rose es un jugador completo, con técnica pulida y gran inteligencia de juego y, sobre todo, encontró la forma para permanecer sano, que ha sido el peor lastre en su carrera.
Rose parecía estar en el ocaso de su carrera, luego de tener un paso gris por los Pistons de Detroit. Pero gracias a la llegada de Thibodeau a los Knicks, el base llegó en cambio el 8 de febrero. De hecho “Thibs” es el coach que ha sacado la mejor versión de Rose, tanto en Chicago, como en los Tmberwolves de Minnesota y ahora en el Bronx.
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En su segunda etapa con los Knicks, Rose comenzó a brillar y ahora es uno de los líderes del equipo, además de convertirse en uno de los principales candidatos al premio como el Mejor Sexto Hombre de la Liga.
En sus últimos cinco partidos, Derrick Rose promedia: 21 puntos, 4.6 asistencias y un 61% de eficiencia en tiros de campo. Su desempeño ha sido clave en la consecución de los tres triunfos logrados en ese lapso. Rose es el base principal del equipo, el cerrador. Sólo D’Angelo Russell, con 21.6 puntos y 7 asistencias, ha producido más que él desde el banco en este tramo.
Este fue el cuarto partido en la temporada donde supera los 20 puntos con más de un 60% de efectividad. Ha tenido cinco juegos con efectividad de 50% o más y 15 puntos marcados.
Rose ahora no tiene la fuerza explosiva que tuvo en su juventud. Ahora es un definidor certero cerca del aro. Todavía tiene la velocidad, astucia y determinación para romper las defensas rivales. En este tramo de cinco partidos, promedia 14.2 penetraciones por encuentro. 21 jugadores tienen al menos esa misma cantidad, y él es el sexto más efectivo de todos, con un 60.5% de efectividad.
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El 49.3% de sus lanzamientos en este periodo son dentro del perímetro de 3 puntos y promedia un 64.7% de eficiencia. En la pintura, su flotadora o tiro corto son letales con 68.4% y en media distancia encesta en el 68.8% de sus tiros.
El equipo tiene un tridente muy interesante para seguir ganando: Randle está viviendo una gran temporada, mientras que RJ Barrett, de segundo año, todavía tiene un trecho muy alto y mucho que aprender.
¿Qué tiene Derrick Rose en el tanque?
Después de sus años de gloria en Chicago, Rose fue víctima constante de sus lesiones, por lo que el nivel que muestra actualmente también habla de una gran preparación mental para sobreponerse a la adversidad. De acuerdo con algunos estudios, lesionarse de manera continua obedece a una respuesta inconsciente ante el estrés. Este sería el caso con Derrick Rose, un gran talento que simplemente no podía permanecer sano:
En 2012 se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Perdió la siguiente temporada por la rehabilitación. Este fue el momento más duro de su carrera |
El 22 de noviembre del 2013, dos meses después de volver a jugar se rompió el menisco |
Regresó en 2014 y se perdió 20 partidos por un desgarro de menisco de la rodilla derecha |
Los Bulls lo enviaron a los Knicks, donde se lesionó el tobillo izquierdo y se rompió el menisco de la pierna izquierda, lesiones que le impidieron jugar 11 partidos |
En 2017 fue a los Cavaliers de Cleveland y por su situación física pensó retirarse con apenas 29 años de edad |
El 8 de febrero del 2018 pasó al Jazz de Utah, donde prescindieron de sus servicios solo dos días después. Al siguiente mes lo contrataron los Timberwolves, de la mano de “Thibs” y tuvo algunos destellos, pero cerró la temporada sin pena ni gloria |
Para contar su historia, el jugador realizó dos documentales: “Derrick Rose: The Return” y “Pooh, The Derrick Rose story film”.
En ellos narra su historia, el dolor que le provocaron sus continuas lesiones, principalmente la primera en Chicago y el duro resurgimiento para mantenerse activo y ahora mostrar lo que fue su nivel, como hizo en un partido contra el Jazz donde marcó 50 puntos, la mejor cifra de su carrera, jugando para los Wolves la Noche de brujas del 2018.
En este material Rose demuestra que a lo largo de su carrera deportiva, no sabe lo que son las limitaciones y ha crecido gracias a su fuerza de voluntad. Por ello, en el primer documental, Rose habla de su necesidad de volver a jugar para retribuir a la franquicia de los Bulls y sus aficionados. Por ello en su rehabilitación habla de aplicar ejercicios mentales para aprender a controlar el estrés.
Rose jugaba al límite de las capacidades en cada encuentro y cada entrenamiento, lideraba un grupo, y sentía sobre sus hombros el peso de guiar a toda una ciudad hacia un título, además de conseguir contratos millonarios, cumplir con diferentes compromisos comerciales y atender a la prensa. Este peso provocó que su cuerpo no pudiera más y como consecuencia, Rose tuvo que aprender a manejar esa presión, mental y física, para mantenerse sano y motivado para competir.
Hoy en día, Derrick Rose habla de haber cambiado sus motivaciones para jugar, no ya para destrozar su cuerpo ni su mente en la duela, sino para establecer objetivos realistas y alcanzables en un tiempo determinado. También realiza entrenamientos mentales para enfrentar situaciones de gran estrés, que eran los que le provocaban tantas lesiones. Si logra dominarse, los Knicks serán un equipo sumamente peligroso en los Playoffs.