Quien no se atreve a luchar contra los mejores, nunca dará batacazos. la Selección Colombia, no siendo el favorito para sacar resultados, venció en menos de cinco meses a tres campeones del mundo seguidos y aunque los focos del fútbol mundial todavía no le apuntan, hay que mirar con buenos ojos el muy buen funcionamiento del plantel dirigido por el argentino Néstor Lorenzo. 

El combinado cafetero pasa por un momento de desarrollo en el que grandes figuras con mucha experiencia le dejaron su lugar a jóvenes promesas y el proceso que tenía José Pékerman cambió de rumbo cuando su asistente asumió el cargo de entrenador. Y es que hubo un gran salto generacional en el propio plantel.

Es una realidad que en el fútbol mundial la edad es sumamente importante. A los jugadores más jóvenes les cuesta mucho adaptarse a los estilos de juego que se utilizaban antes, ya que los directores técnicos muchas veces no están dispuestos a formar planteos “modernos”. Quizás a Pékerman, quien alcanzó la cima mundial ganando tres veces la Copa Mundial Sub-20 con Argentina, los años lo fueron postergando y ahora le costó “llegar” a esa juventud colombiana. Los resultados negativos en la Selección Colombia eran moneda corriente y tuvo que dejar el timón.

Néstor Lorenzo, el timonel de los grandes resultados de la Selección Colombia

La Copa América comenzará en poco tiempo y Colombia siempre está dentro del lote de los cinco planteles más fuertes. Nunca obligada a ganarla, pero sí forma parte de las candidatas. Lorenzo tomó la posta para imponer un estilo de juego de velocidad en ataque y buen posicionamiento en defensa.

Sin la constelación de nombres que agrupan Argentina o Brasil, en los últimos meses Colombia dio tres golpes de esos que en Mundial abren las puertas hasta la final:

Gelsenkirchen, 20 de junio de 2023: Alemania 0-2 Colombia

Goles: Luis Díaz y Juan Guillermo Cuadrado.

Barranquilla, 16 de noviembre de 2023: Colombia 2-1 Brasil

Goles: Luis Díaz (2)

Londres, 22 de marzo de 2024: Colombia 1-0 España

Gol: Daniel Muñoz

Si se habla de velocidad es imposible no recalcar el gran momento que atraviesa Luis Díaz. El Guajiro es la gran estrella y participó en los goles a los tres campeones del mundo que enfrentó. El atacante está rodeado de muchos otros jugadores con un gran compromiso. La ilusión de conseguir grandes cosas se nota en los rostros colombianos desde hace varios juegos.

¿Mejores récords = más presión?

Bajo la dirección del nuevo entrenador, Colombia consiguió una racha de partidos sin conocer la derrota. La cifra es de 21 juegos invictos en diversas competencias, incluyendo además de estos últimos amistosos, las eliminatorias. Es decir, este logro le da a La Tricolor un plus de confianza para lo que se viene, pero también eleva el compromiso del plantel. 

Todo colombiano sueña en superar la época del Profesor Francisco Maturana, cuando el país era una potencia y llegaba a Estados Unidos ’94 en su mejor momento histórico, después de humillar a Argentina en el mismísimo estadio Monumental, en Buenos Aires. Hace tres décadas había hilvanado una seguidilla de 27 partidos sin perder. Una racha extraordinaria que se terminó cortando en la derrota en fase de grupos ante el anfitrión mundialista. 

¿Cuántos partidos más tendría que ganar según el calendario actual? Sería un invicto hasta octavos de final inclusive de la Copa América 2024. Obviamente, en caso de que se agregue algún amistoso cercano a la competencia, cambiaría este dato.

Hay que ser realistas, si no se gana en competiciones oficiales, estas rachas quedarán solamente en anécdota. En el Mundial 1994 la racha no sirvió de nada, y la ilusión sobredimensionada hizo más profunda la decepción. ¿Colombia llega “presionada” a la Copa América?