Si las cosas no van bien para Miguel Herrera, no pasan ni dos días cuando todos los hermanos y su mamá Marisela le llaman, le escriben. Nunca está solo. Ni en casa, ni en el vestuario. El técnico del América tuvo su propia ‘liga’ desde muy niño cuando su papá se fue a trabajar a Estados Unidos y nunca más volvió. 

Siempre en casa le han querido. “Si como técnico es excelente, como persona y hermano es lo máximo”, suele decir su hermano Tito cuando se refiere al entrenador del América. Y hace varios años, en 2008, Miguel aprendió que trabajar el vestuario era vital para llegar a la meta. Cuando descendió con el Veracruz, “fue una de las más grandes lecciones de esta profesión, aprendí mucho”.

Si las cosas marchan como hasta ahora, Miguel Herrera terminará su era en el América en 2024 cuando termine su contrato (a menos que extienda su relación laboral). En total habrá dirigido al club (con sus dos etapas) una década al club, y un título más y será el entrenador más ganador en la historia del equipo. Además será de los técnicos que más tiempo se han mantenido en su puesto. Desde 1994 cuando se fue Miguel Ángel El Zurdo López, América no tiene un técnico que dure más de dos años y medio en el puesto, hasta Miguel.

¿Por qué Miguel Herrera sigue en el América?

Sí, mucho se debe a los resultados, pero ¿cómo es que Miguel Herrera se mantiene en el puesto?, ¿por qué lo respaldan? Un par de personas que han trabajado con él en América y Monterrey dicen que la principal cualidad (además de su capacidad táctica) está en que es cercano a los jugadores y a su grupo. 

La receta no es complicada: organiza asados continuamente con sus jugadores, hace retas en los entrenamientos y dedica tiempo a sus futbolistas, por eso cuando alguien llega ‘medio raro’ a la práctica se acerca a ellos y les pregunta ‘¿qué pasó?, ‘¿estás bien, te paso algo?’ 

Eric Olavarrieta, experto en imagen pública y deportiva lo define mejor:

“Miguel ha mejorado mucho su discurso y cuando habla genera una empatía con sus jugadores, si tuviéramos que decirlo más técnicamente cuando habla hace que el cerebro humano produzca varias sustancias químicas que son las que generan la felicidad, emociones, es increíble lo que genera el uso correcto de las palabras”.

En palabras más concretas: los discursos y el liderazgo de Miguel Herrera producen dopamina, serotonina, endorfinas y la oxitocina. Luego, llegan los resultados.

El estado de ánimo es vital para un líder

Jorge Valdano dice que uno de los caminos más rentables de liderazgo a largo plazo es poder trabajar sobre el “estado de ánimo de la gente”, también reconoce que desde el miedo y la dictadura se puede lograr ‘éxito’, sobre todo a corto plazo, pero eso al final es “a costa de felicidad de la gente”. 

Miguel es justo parte del primer grupo. Incluso da consejos de finanzas personales y prefiere llevarse una mala cara de los jóvenes cuando les dice que no quiere verlos llegar con un auto nuevo si antes no tienen un patrimonio a largo plazo como una casa o un departamento. Eso le dijo en entrevista a Farid Dieck hace algunos meses.

“Se desprendió de esa imagen de entrenador jefe y pasó a ser entrenador líder, enfocado en el servicio de las personas para conseguir sus objetivos y eso ayuda mucho sobre todo en un vestidor plagado de estrellas”, dice el especialista en imagen Eric Olavarrieta.

Miguel Herrera reconoce que le gusta entrar a la vida personal de sus jugadores, “saber qué les atañe”. “Y si a eso le sumas que es un hombre que sabe proyectar los valores del club pues entonces potencializa sus cualidades… aunque tiene un pendiente con su control emocional”, reflexiona Eric quien ha dado charlas y asesorías en la industria del futbol.

Resiliencia y sinceridad, características del Piojo

Hacer equipo con su familia o con su padrastro años después de que los abandonó su padre es una mentalidad que le ha dado resultado en la cancha. Los fracasos también. Su paso en clubes como Veracruz y Estudiantes Tecos le ayudó a aprender desde las carencias y los malos resultados donde ganaba menos de tres partidos de cada 10 que dirigió.

“Yo cuando un jugador ya no entra en planes soy el primero que se lo dice, en el momento me puede rechazar pero después se agradece que sean directos contigo” comentó hace un par de años Miguel cuando habló sobre la forma en cómo conforma a sus equipos.

Miguel Herrera cuenta con las tres cualidades de liderazgo que enarboló Marx Weber, el padre de la sociología moderna y autor de una de las grandes obras de la historia “Economía y sociedad”:

1.- Ser miembro del equipo. Compartir los valores, compartiendo lo mismo que sus dirigidos.

2.- Mente abierta: preparado y adaptado a los cambios.

3.- Proactivo.

El #FueraPiojo ha sido relativamente constante en redes sociales este año. Es casi un hecho que quienes lo postean no saben que dentro, en el vestuario, Miguel tiene el respaldo (casi total) porque durante la semana trabaja la empatía (además de la táctica) y porque minutos antes de cada partido enciende el fuego de sus jugadores desde el discurso. 

Cuando generas lazos, entonces el compromiso es todavía mayor, dicen los especialistas. “Trabajar el ánimo de las personas para potencializar su competitividad”, así describe Valdano el tipo de líder que es Miguel.

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