Hay lugares que, en ciertas ocasiones, son mágicos. Una serie de situaciones que convergen para que un lugar que tiene una fase “común” se convierta en algo fuera de lo establecido. La Arena México no es lo mismo una función de martes que una de viernes. Wembley está bien para los turistas pero ruge cuando hay un partido importante. El Estadio Olímpico de Atatürk en Estambul puede ser bueno para partidos comunes, pero tiene una mística realmente especial cuando se trata de un encuentro de Champions League.

El Estadio Olímpico de Atatürk se construyó en 1999 pero lo terminaron recién en 2002. Tiene una capacidad para 76761 espectadores sentados y se reinauguró para que fuera parte de los establecimientos habilitados para lo que serían los Juegos Olímpicos de Estambul 2008, pero finalmente se realizaron en China, precisamente en Beijing.

Su nombre rinde honor al primer presidente y fundador de la República de Turquía, Mustafa Kemal Atatürk. El récord de espectadores del estadio (y de la historia del fútbol turco) se dio el 31 de julio de 2002. Esto ocurrió en un partido entre el Galatasaray, equipo con mayor predominancia en el país turco, y el Olympiacos, uno de los grandes de Grecia. Varios equipos turcos lo usaron como para hacer de local en algunas temporadas y es uno de los estadios utilizados por la Selección Turca. No obstante ninguno de ellos pudo llenar el estadio más que los partidos de clubes internacionales.

La casa del milagro de Estambul, memorable final de Champions League

La UEFA, casa madre del fútbol europeo, le dio la categorización de 5 estrellas al estadio, o sea, estaría habilitado para albergar las finales de las mejores competencias de la organización y así lo hizo en 2005, con el partido definitorio de la Champions League entre el Liverpool de Inglaterra y el Milan de Italia.

Aquel partido histórico, que fue catalogado como “El Milagro de Estambul”, quedó marcado como una de las mejores finales no solo del certamen continental sino de la historia del fútbol. El Milan, repleto de estrellas como Cafú, Crespo, Kaká y Shevchenko empezó aplastando al Liverpool de Rafa Benítez ganándole por 3-0 al descanso pero, en unos 45 minutos para el infarto, Gerrard, Smicer y Xabi alonso empataron para el conjunto inglés y llevaron el partido a la prórroga, para luego ganarlo por 3 a 2 en la tanda de los penaltis.

Este fue, hasta ahora, el último partido definitorio de Champions que se ha jugado allí, pero la mística del escenario es insuperable. Un equipo italiano y uno inglés se medirán en una final europea una vez más en el Olímpico de Estambul. Manchester City e Inter de Milán se enfrentarán para ver quién se lleva la corona en donde, si nos remontamos a lo que pasó en 2005, los ingleses tienen ventaja. ¿Quién crees que ganará la final de mañana? ¿Habrá otro milagro de Estambul?