Hasta la anteúltima fecha de la Liga Profesional 2022, Huracán tenía chances de ser campeón. El triunfo de Boca frente a Gimnasia en un encuentro postergado lo dejó afuera, pero finalizó el torneo tercero junto con River y clasificó al repechaje de la Copa Libertadores de este año, para la que mantuvo la base y sumó refuerzos, en principio, interesantes, como Lucas Castro y Juan Manuel García.Inició esta Liga Profesional con 10 puntos sobre 12 posibles y fue escolta durante ese tramo.

Tras haber pasado la Fase 2 de Libertadores frente a Boston River, comenzó la merma: un empate en el clásico ante San Lorenzo, el 0-0 como local frente a Sporting Cristal y la derrota ante Estudiantes anticiparon lo que fue el principio del fin. En Lima, cayó en la última jugada y se quedó afuera de la máxima competencia internacional, con el agravante de que minutos antes del cierre García erró un mano a mano increíble. Ese mazazo fue el primero de muchos, de los que todavía no logra recuperarse.

Por torneo, perdió seis, empató uno y ganó uno. Por Sudamericana, la cosecha de cuatro unidades sobre nueve posibles no conformó a los jugadores, dirigencia y al DT, Diego Dabove, y este decidió renunciar tras la derrota ante Lanús. No hubo tiempo para lamentos y su reemplazo fue Sebastián Battaglia, bicampeón con Boca como entrenador. Sin embargo, su ciclo comenzó con tres empates y, para echar más leña al fuego, continuó con cuatro derrotas.

Cuando parecía que se terminaba el ciclo del ex mediocampista, una reunión entre plantel, dirigentes y cuerpo técnico le dio respaldo total, pero solamente duró dos cotejos más: un empate de local en que el técnico insultó a los plateistas y una derrota en Paraguay frente a Guaraní por Copa Sudamericana que lo dejó afuera. Tras la renuncia de Battaglia en conferencia, Fernando Tobio hizo público lo que era un secreto a voces.

“Me llena de orgullo tener compañeros de 18, 20 años que ponen la cara por el club. Otros compañeros por un dolorcito no están y no dan la cara. Eso a mí me molesta mucho y se hace todo muy difícil”, manifestó el defensor. Con este clima y con entrenador interino, el Globo salió a jugar la final por la permanencia ante Independiente. Cayó 1-0 y quedó solo en zona de descenso directo.

Diego Martínez, que sonó para asumir en Boca, se hizo cargo de Huracán en medio de la tempestad. En este momento, la institución de Parque Patricios está anteúltima, con cuatro triunfos, siete empates y 11 derrotas en 22 jornadas, y quedó eliminada de la competencia internacional. El ex Tigre arriba al “Globo” como un entrenador de chapa y de renombre, al cual muchos clubes desearían tener, aunque no se sabe si es un experto en pilotar la tormenta.

Llega, casi, con el mismo cartel que los refuerzos del último mercado: a priori, su contratación luce buena. Esta vez, los hinchas desearán que ese buen presentimiento se cumpla más que nunca; de lo contrario, el descenso acecha y más tras consumarse una derrota más, ahora en la fecha 24 ante Boca Juniors.