“Fue duro, días horribles. Fue duro, pero el apoyo que he tenido durante este período me ha ayudado mucho. Obviamente jugar al baloncesto es algo que he hecho toda mi vida, algo terapéutico para mí. Obviamente, quitármelo lo hizo más complicado”, relata Ja Morant. Desde marzo que el base estrella de los Memphis Grizzlies no pisaba el parquet. 33 partidos, 1584 minutos o 95.040 segundos de tiempo neto de parquet, el salido de Murray State volvió de la mejor manera: 34 puntos y el tiro ganador para que sus osos vencieran a los New Orleans Pelicans, como si nada hubiera pasado.

Las vísperas del encuentro que protagonizarían hoy de visitante los Memphis Grizzlies ya tenían una victoria sin que la pelota estuviese por los aires: Ja Morant, que si bien viajó a todos los partidos con el equipo y realizó los entrenamientos, por fin podría calzarse la camiseta número 12 y volver a integrar el conjunto dirigido por Taylor Jenkins: “Parece estar en una muy buena posición. La forma con la que respondió en los ejercicios de 5 vs. 5 en los últimos días han sido muy buena. Realmente ha estado invirtiendo mucho en el acondicionamiento de su cuerpo, en su fuerza y nos ha impresionado con su trabajo”, había manifestado el entrenador en las horas previas al encuentro. 

Tanta confianza le tuvo su coach que Morant no solo fue titular, sino que fue de los que más minutos jugó, con 35 de 48 posibles. Su planilla cerró con unos impresionantes 34 puntos, la cifra más alta en un jugador que volvió luego de 25 partidos en toda la historia de la liga. 8 asistencias, 6 rebotes y 50% de efectividad en tiros de campo solo quedarán para la anécdota, porque lo que quedará grabado para siempre en la memoria fue el tiro ganador. Siete segundos por jugar, Isolation para el 12, que con una penetración de autor dejó una bandeja volada para callar a todo el Smoothie King Center, y para que sus compañeros se avalanchen encima de él.

“I´m back” lanzó a la cámara el base, que compartió lo que sentía en la entrevista post partido: “Estos 8 meses fueron muy oscuros para mi, pero el baloncesto es mi vida y tengo suerte de estar de vuelta” recalcó el joven perimetral, que destacó la tarea del equipo en su recuperación: “Son mis hermanos, pasamos mucho tiempo juntos y son muy importantes para mí. Siempre me dijeron que sea yo y que crea en lo que podía hacer” , soltó Morant, que por último le dedicó el triunfo a su madre por su cumpleaños.

Visiblemente más calmo y centrado, Morant empezó con el pie derecho su retorno a la mejor liga del mundo…¿Crees que seguirá en este sendero?