Un 14 de septiembre de 2009, se disputó una final histórica en el US Open que marcó un antes y un después. Por un lado, llegaba Roger Federer, pentacampeón desde 2004 a 2008, que había barrido a grandes jugadores como Lleyton Hewitt, Tommy Robredo, Robin Soderling y Novak Djokovic. Por el otro, un joven Juan Martín del Potro, de apenas 20 años, que pisaba fuerte en el circuito con tres títulos ATP 500 y que había despachado a su compatriota Juan Mónaco, a Marin Cilic y a los españoles Juan Carlos Ferrero y Rafael Nadal.
En la previa, el gran favorito, por la racha de más de cinco años sin perder que acarreaba, era Roger Federer. Ya campeón de 15 Grand Slam y siendo el máximo ganador, uno arriba de Sampras, quería terminar el año con tres de los cuatro Majors. Por eso, en el primer set, marcó la diferencia por 6-3 y dio su primer paso hacia otro título en la ciudad estadounidense.
En el segundo parcial, la gesta de Delpo comenzaría: tras la paridad, el argentino se llevó el tiebreak y el set por 7-6 (5). En el tercero, la supremacía de Roger Federer volvía a hacerse notar, ya que Su Majestad doblegaba al tandilense por 6-4 y se estacionaba a tan solo un set de su sexto US Open consecutivo.
Cuando todos se preparaban para una nueva consagración del suizo, el argentino sacó su espíritu de campeón para nivelar el partido nuevamente con otro tiebreak. Esta vez, se llevó el cuarto set por 7-6 (4) y mandó la definición al 5to set.
Más fresco, lógicamente por su edad, Juan Martín Del Potro se puso 3-0 arriba quebrando en el segundo game del parcial. Manteniendo su saque, llegó al servicio de Federer por delante 5-2. En ese game, luego de un error no forzado de revés de su rival, tuvo los dos primeros match points, que Roger levantó después de un largo peloteo y dos errores de su rival. Un buen saque le dio la ventaja, pero Delpo conectó una gran derecha y una doble falta le otorgó el tercer punto para el campeonato.
La tercera fue la vencida: luego de un peloteo, el argentino apuró con su derecha y lanzó un aproach por la paralela al que el basiliense llegó exigido y, de revés, echó fuera por centímetros. “Se derrumba la torre pero de alegría”, fueron las palabras que quedaron inmortalizadas para graficar lo que había sucedido: Juan Martín Del Potro, con tan solo 20 años, se consagró campeón del Abierto de los Estados Unidos y se desplomó en el piso del Arthur Ashe de la emoción tras su victoria.
Juan Martín del Potro y su único Grand Slam: el US Open del 2009
Este fue el único título de Grand Slam de la carrera de “La Torre de Tandil”. Si no hubiese sido por las lesiones, habría ganado más títulos de este nivel y posiblemente, habría llegado al Nro. 1. Sin embargo, volvió a jugar la final en el Arthur Ashe en 2018 ante Djokovic y siempre fue un jugador a temer en este certamen.
Al regreso a Argentina, Del Potro fue recibido por miles de personas. Lo destacaron como ciudadano ilustre y embajador deportivo por el intendente Miguel Ángel Lunghi. En ese acto, manifestó “Este recibimiento fue único y va a quedar para toda la vida. Voy a estar acá para siempre, Tandil es mi ciudad y no la cambio por ninguna del mundo”. No fue para menos: quedó por siempre en el libro dorado del tenis argentino. Fue el tercer tenista masculino en ser campeón de Grand Slam y el segundo en ganar US Open, tras el título de Guillermo Vilas. Por otro lado, Roger Federer no fue campeón del Abierto de los Estados Unidos de nuevo. Luego de esa final perdida, la cuenta se detuvo en esos cinco títulos consecutivos obtenidos de 2004 a 2008.
